La caída de la transmisión empieza a perder fuerza y ya han muerto 42 gallegos por covid en lo que llevamos de semana

La bajada de la transmisión  ha aliviado mucho -y sigue aliviando- la presión hospitalaria, aunque el número de hospitalizados es todavía notable, ronda lo 500 y explica, al menos en parte, los problemas que están teniendo el SERGAS en áreas como Pontevedra. 

La curva de fallecidos es la única que no ha conquistado su pico en esta ola. Las 8 muertes comunicadas hoy implican que, de media desde una perspectiva mensual, cada jornada están muriendo por covid 7,5 gallegos. Es una cifra pésima, la peor desde el invierno de 2021. O llegan nuevas vacunas o dosis o la gripalización impuesta esta primavera nos costará miles de muertos este invierno. Por ahora ya nos ha costado unos niveles de muertes que son los peores del año con diferencia.

La incidencia acumulada semanal 7 la incidencia acumulada a 14 días jamás habían estado tan bajas desde que empezamos con el nuevo sistema de medición en primavera. Desde que alcanzaron un pico altísimo a principios de julio, no han parado de bajar vertiginosamente, aunque en los últimos días esta mejoría ha perdido algo de fuerza.  

El doble de la incidencia a 7 días es bastante menor que la incidencia a 14 días.  La razón de tasas es de 0,79 , por lo tanto en la última semana hubo un   21% de positivos menos  que en la penúltima. Es una mejoría aún notablemente veloz, pero también notablemente más lenta que la máxima velocidad de descenso que alcanzamos hace una semana, cuando los casos activos llegaron a bajar a un -30%. Seguimos mejorando pero cada vez con menos brío.

La evolución de la tasa de positividad nos permite estar tranquilos y descartar que esta rápida mejoría se deba a menos PCR, al menos no exclusivamente. La media semanal decrece unas décimas hasta el 34,2% , el mejor porcentaje de un mes en el que llegamos a superar ampliamente el 50%.  Llevamos más de una semana haciendo unas 600-700 PCRs al día y aún así la tasa de positividad aguanta a la baja.
 

TRES CAMBIOS DE MÉTODO ESTOS MESES

Hay que recordar que con el sistema implantado, solo se hacen pruebas a personas mayores de 60 y colectivos especialmente vulnerables, enfermos de cáncer o asmáticos, por ejemplo. También ha profesionales sanitarios y trabajadores de residencias.

Ahora tampoco se suman los positivos de autotest caseros, que eran mayoría en el anterior sistema. Esto provoca que los índices de sean muchísimo más bajos de lo que es la transmisión real. 

El cambio de método de seguimiento de la transmisión se produjo a finales de marzo. Hubo otro cambio de forma de contar posterior, en hospitalización. El SERGAS redujo el número de días que un hospitalizado cuenta como enfermo de covid. Esto redujo artificialmente la cifra de hospitalizados se ejecutó en la penúltima semana de abril.

En los últimos meses hubo un tercer cambio estadístico producto de la polémica estrategia de 'gripalización', en fallecimientos. A finales de mayo la Xunta dejó de contar todos los muertos con covid. El SERGAS ahora solo informa de los decesos en los que considera que el coronavirus jugó un papel clave, algo que no deja de ser muy subjetivo. Esto también provocó la rebaja artificial de la curva de fallecimientos.  

EVOLUCIÓN DE LOS CASOS ACTIVOS

El total de infectados desciende hoy un -8,4 %.  Buena cifra pero insuficiente para que la que realmente importa, la media semanal, recupere la vertiginosa bajada de hace una semana. Se ha estancado en torno al 7,4%.

Esto quiere decir que, aunque seguimos reduciendo los casos activos cada día, esta reducción ya no es mayor a cada día que pasa. Ahora está estabilizada y lo esperable es que a medida que avanza el mes la mejoría sea cada día más débil hasta que empiece otra ola.  

DATOS POR ÁREAS

En la curva de casos activos por distritos sanitarios se aprecia que la mejoría aún no ha tocado suelo en ninguna área pero el cambio de tendencia no parece lejano. Hay áreas como Pontevedra que ya han logrado rebajar el suelo de la anterior ola, otras como Ferrol todavía están significativamente por encima.

Por vez primera esta semana no hay ningún distrito que comunique más de 100 casos activos. El más poblado, A Coruña, es el área con más presión hospitalaria, es la única con más de 100 pacientes hospitalizados.

ANÁLISIS ACTUAL Y EVOLUCIÓN POSIBLE

Con estas estadísticas, la inferencia que se puede realizar es:

• La pandemia está en unos niveles de transmisión todavía notables, pero que son los más bajos en muchos meses. 
• Además, aguanta a la baja. Esta mejoría está perdiendo, eso sí, fuelle y es probable que a principios de agosto empiece otra ola.
• Con la transmisión a la baja desde principios de mes, es normal que los hospitalizados también bajen. La próxima semana bajaremos de los 500 y es probable que caigamos un poco más que el suelo de la anterior ola, que fue 398. 
• La mortalidad suele empezar a bajar un mes después del pico de transmisión, que fue a principios de julio. Desgraciadamente, por lo tanto, todavía nos queda, aproximadamente, una semana de más y más fallecimientos.
• El nivel de muertes es el principal problema que nos está deparando la estrategia de gripalización. En los picos de las olas, los contagios son masivos, posiblemente jamás se contagió tanta gente al mismo tiempo como a finales de junio. Las vacunas nos permiten que el sistema sanitario no colapse. Ahora bien, un contagio masivo entre los mayores implica que muchas personas débiles acaben muriendo. Al ritmo de este último mes, 2.800 gallegos morirían por covid cada año.