Mancomunidades de montes protestan contra la "usurpación" de sus tierras y la "falta de apoyo" de la Xunta de Galicia

Representantes de las Comunidades de Montes Veciñais en Man Común de Galicia presentarón este pasado miércoles en la ciudad de Vigo un manifiesto común contra lo que consideran "usurpación" de sus tierras para usos empresariales, criticando lo que ellos cualifican de falta de apoyo por parte del Gobierno de la Xunta de Galicia.

La presunta ocupación de tierras de montes vecinales por parte de las empresas y propietarios particulares, principalmente en el área de Vigo y el sur de la provincia de Pontevedra, generó ya por lo menos una docena de denuncias en los juzgados, según ha trascendido a principios de este año. El propio presidente de la Xunta, Afonso Rueda, apostó por una comprensión mutua entre las partes, con advertencia de que legislará para buscar una solución al problema, algo que las comunidades tema que se hará sin tenerlas en cuenta en la futura reforma que regula los montes vecinales.

Así, el manifiestao 'O monte veciñal en man común: Unha realidade histórica viva do século XXI' fue acordado por la Asociación Forestal de Galicia, la Organización Galega de Comunidades de Montes y la Mancomunidade de Montes de Vigo y suscrito también por las Mancomunidades de Montes de Pontevedra, del Barbanza de O Morrazo, de Val Miños y de Baixo Miño, así como por un gran abanico de Cominidades de Montes Veciñais en Man Común presentes, como es el caso de Salvaterra, Atios, Tameiga, Beluso, Xinzo, Vilaboa, Cabral, Beade, Comesaña, Matamá, Candeán, Teis, Oia, entre otras.

Las entidades que firman este manifiesto y su "completo desacuerdo con las manifestaciones realizadas por la Consellería do Medio Rural posicionándose en contra de lo que la legislación establece y la jurisprudencia confirma día tras día".

Tampoco se han mostrado de acuerdo con las declaraciones del Presidente de la Xunta de Galicia en el mes de julio de 2023 en la dirección de que "en la futura ley que regulará los montes vecinales y que está en colaboración, tendremos que dar una respuesta que dé satisfacción a todos los afectados —viviendas, instalaciones industriales, equipamentos púbicos—". "Si no es posible —el consenso— está la capacidad de gobernar y tomar decisiones" sobre el monte vecinal que ya no se usa como tal.

Estas declaraciones de Alfonso Rueda son tildadas por los firmantes de "una falta de respeto absoluto para un montón de comuneros y comuneras que siguen trabajando de manera desinteresada por el bien común, ahora con nuevos retos para antender las necesidades del vecindario y de la realidad socioeconómica que la envuelve".

Reconocen además una "auténtica preocupación que a las puertas de una modificación legal de la Ley de Montes en Man Común de Galicia pueda haber un tic autoritario impropio de los tiempos que vivimos y el posicionamiento desafortunado a favor de un colectivo autodenominado 'Plataforma Galega de afectados polas Comunidades de Montes' que representa un lobby empresarial que quere retrotraerse á 'usurpación' de antaño".