De Frutos no descarta denunciar al PSOE "por acoso"
Se enteró por la prensa de su "castigo", tras romper la disciplina de voto en la investidura de Rajoy.
La diputada del PSOE en el Congreso por Ourense, Rocío de Frutos, se ha mostrado este viernes "indignadísima" por haberse enterado por la prensa de su 'castigo' tras romper la disciplina de voto en la investidura de Mariano Rajoy.
En concreto, la gestora que dirige actualmente el PSOE decidió apartarla de la portavocía adjunta de la Comisión de Empleo de la Cámara baja y, en este escenario, la ourensana ha advertido de que no descarta denunciar a su partido por "acoso" en caso de que no se le permita "trabajar con fluidez".
"Espero que la retirada de la portavocía adjunta no suponga trabas en el registro de iniciativas, porque entonces sí que tomaría otras medidas más drásticas", ha incidido, desde el convencimiento de que influir sobre su trabajo sería "cierto acoso".
En la misma línea, en declaraciones a la Radio Galega, ha rechazado que se le quite "visibilidad" en el Congreso, porque, como diputada por Ourense, sería restársela a su provincia. No sería "de recibo", a su juicio, y menos "por un no" que se le prometió a los votantes socialistas y que iba "en el programa del PSOE".
"PERFILES IDÓNEOS"
A continuación, De Frutos ha dado cuenta de que contactó con el portavoz de Empleo del PSOE en el Congreso, Rafael Simancas, "y no sabía nada" de los cambios decididos por parte de la gestora.
Lo que ha rechazado es la lectura de que esos relevos obedecen a que la gestora buscó "perfiles idóneos" para las distintas áreas. "Yo no dudo de la idoneidad de otras personas, pero también garantizo la mía", ha sentenciado.
De hecho, se ha definido como una persona "responsable y trabajadora" que siempre ha estado "vinculada al mundo del trabajo" y a la defensa de los trabajadores "desde la izquierda". "Supongo que por eso me llamaron", ha resuelto.
En este escenario, en lo que ha hecho hincapié la socialista ourensana es en que se siente "muy triste e indignada", sobre todo, por la falta de comunicación de las decisiones.
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