Juan González Soler, médico internista: "Queremos atender bien a nuestros pacientes, no más vacaciones"

Los internistas renuncian a sus trabajos ante la falta de contratos laborales dignos. 

Actualmente, la media de edad de los médicos especializados en esta área asciende a 50 años. 

El médico internista de Ourense, Juan González Soler.

La situación para los formativos de Medicina Interna se hace cada vez más insostenible. Aunque la pandemia fue el detonante que dejó a la sanidad pública en una situación deplorable, la realidad es que los internistas llevan reclamando unas condiciones dignas desde hace más tiempo. 

Cada vez son más licenciados los que no apuestan por la sanidad pública. Juan González Soler, médico internista del CHUO y vocal del Colegio Médico de Ourense, valoró la situación e indica que el principal problema reside en tener más carga laboral y, a su vez, más falta de recursos.

Es consiente de que no habrá una solución mágica, pero igualmente reclama con urgencia la necesidad de introducir recursos humanos y buenas condiciones: "Los médicos se nos están yendo y no sólo son jóvenes". Los internistas, afirma, se van a otras áreas sanitarias o a la sanidad privada porque ofrecen mejores contratos de trabajo. 

Recientemente Amalia Cadavid, responsable de Medicina Interna de Ourense, dimitió precisamente por estas condiciones. Sin embargo, su puesto aún no está cubierto, pero el internista supone que le asignarán el cargo a alguien en los próximos días. "Quien asuma ese puesto tiene que ser muy valiente en estos momentos", declaraba. 

En el caso de los recién licenciados, Soler entiende y justifica su postura: "Se trata de una generación mucho más formada y acostumbrada a viajar. En su caso no les importa desplazarse en cualquier momento a otra comunidad o, incluso, a otro país de Europa. Entonces, o fidelizamos a la gente de aquí con buenos contratos o se nos van". 

Este 1 de junio el Conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, pedía comprensión a los internistas mientras no se resolvía la OPE  y, también, alegaba que Galicia estaba por encima de la media estatal en el número de especialistas en medicina interna. 

No obstante, el vocal del Colegio de Médicos de Ourense discrepa con Comesaña en cuanto a esa interpretación: "Los números son muy manejables. Si yo te digo que Ourense tiene más internistas que Lugo, te estoy diciendo una realidad. Ahora, si yo te digo que los pacientes crónicos los maneja la medicina interna y la geriatría y que Lugo tiene 15 geriatras, entonces estoy usando los números como a mí me conviene". 

Así explicó los cálculos del Coselleiro, añadiendo que los internistas de Ourense están ejerciendo en otros campos como domicilio y urgencias. "No los puedes contar como efectivos de medicina interna", sentenció.

"ESTAMOS EN UNA SITUACIÓN DE ROTURA"

Asegura que las gerencias son conscientes de que existe un problema. Incluso, piensa que algunas de las medidas que proponen se pueden evaluar, pero también urge resolver este problema de sobrecarga laboral. "Se han quedado a medio camino, tienen que ofrecer mejores condiciones", opina.

Así mismo, considera que el problema principal reside en que la sanidad debe estar bien vertebrada, es decir, ofrecer plazas según las condiciones que más se necesiten en cada área sanitaria. En el caso de Ourense, por tratarse de una población envejecida, ofertar un número más elevado de internistas podría ayudar a mejorar esa vertebración.

"Comunidades como la andaluza o la vasca nos llevan muchos años de ventaja. Aquí no se ha invertido en priorizar las necesidades de la población gallega, sino en otra cosa", puntualizó finalmente sobre las gerencias. 

SOLUCIÓN PREVENTIVA DE LA XUNTA: ¿ES EFICIENTE?

La propuesta que verbalizó ayer el Conselleiro es la siguiente: Mientras no se resuelva la OPE, los médicos de otros hospitales cubrirán esas plazas vacías en el Hospital Comarcal de Ourense.

P: ¿Es eficiente?

R: Es la ley de la manta pequeña: estiras para cubrir la cabeza y destapas los pies. No es solución. Ayer ellos mismos reconocían que la sanidad en Ourense estaba a una ocupación de 160% y, aún por encima, coges a esos profesionales y les obligas a cubrir las carencias en el Barco de Valdeorras... eso no es eficiente.Ellos saben cual es la solución, pero no tienen recursos porque se destinan a otras cosas. Entonces, lo que tienen que hacer es priorizar. 

"LOS PACIENTES SON EL MOTIVO DE LA MOVILIZACIÓN"

Juan González Soler explica que el motivo que ha impulsado a los internistas a iniciar esta lucha por mejores condiciones de trabajo son los propios pacientes. "No pedimos más vacaciones, ni remuneraciones, estamos pidiendo mejoras de condiciones para atender bien a nuestros pacientes", alegó. 

Para el vocal, la formación de los facultativos de Ourense es "excelente", pero no pueden hacerlo bien porque los hacen correr por los corredores del hospital . "Llegamos as a las cinco de la tarde frustrados porque no pudimos dedicarle suficiente tiempo a los pacientes e informar a los familiares", añadía. Después, el internista concluyó: "Somos buenos profesionales, no podemos dejar que las condiciones nos conviertan en malos profesionales".