La Delegación del Gobierno se compromete a colaborar para garantizar el suministro en el sector alimentario
Miñones mantuvo un encuentro con el presidente de la CEG y representantes de algunas de las principales empresas del sector
La Delegación del Gobierno se ha comprometido a prestar los medios necesarios para garantizar el suministro de mercancías en el sector alimentario para paliar los efectos del paro en el transporte.
En la tarde de este lunes se ha celebrado un encuentro entre el Delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, con el presidente de la CEG, Juan Manuel Vieites, junto a portavoces de algunas de las empresas de cadena alimentaria de Galicia --Coren, Estrella Galicia, Calvo, Jealsa, Leche Río, Gadisa, Vegalsa-Eroski, Nueva Pescanova y la Asociación Gallega de Fabricantes de Alimentos Compuestos (Agafac)--.
En la reunión, que da continuidad a la celebrada el pasado 10 de marzo --cuatro días antes del inicio de los paros--, los representantes empresariales han solicitado al Gobierno que solucione lo que entienden como una "situación insostenible" que, advierten, puede llevar al "colapso del suministro". Y, en particular, piden a la Delegación del Gobierno que "tome las medidas necesarias" para garantizar el movimiento de mercancías mientras duren las protestas.
Acompañado en la reunión por el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña, el coronel Javier Jambrina; el jefe regional de Operaciones de Galicia y el comisario jefe José María Esteban Corral; Miñones ha trasladado al sector la "total colaboración" de la Delegación del Gobierno para garantizar que los productos llegen a las empresas.
Como muestra de ello, el representante del Ejecutivo central en la Comunidad gallega ha señalado las 900 escoltas realizadas desde el inicio de las protestas, entre ellas, la llevada a cabo este mismo lunes a un convoy de 21 camiones dirigidos a la fábrica de Estrella Galicia en A Coruña procedente de Zamora.
SITUACIÓN DE "EXTREMA GRAVEDAD"
Inciden en que la situación es de "extrema gravedad" que afecta particularmente a Galicia y que está provocada por "la escalada de costes asumida por el sector durante los últimos años y agravada durante las últimas semanas por la guerra en Ucrania".
Denuncian el "desabastecimiento" en fábricas y en el comercio minorista, la "rotura" de cadenas de suministro y la "falta de materias primas" en las factorías, al tiempo que avisan de que ya se han producido cierres en negocios.
Todo ello, según la patronal, "está poniendo al país en una coyuntura límite con la destrucción del tejido productivo y empleo que puede concluir en un estado de alarma social y profunda crisis que condicionará el futuro del mismo".
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