La cuarta ola está ya casi plana en Galicia, alimentando las esperanzas de que sea una olita

La pandemia sigue creciendo. En términos semanales, lleva creciendo desde casi principio de mes. Con todo, la Xunta no adoptó un discurso conservador respecto a los los alivios de restricciones hasta este fin de semana.

Este crecimiento está perdiendo fuerza en las últimas jornadas. Las curvas semanales y bisemanales se están aplanando.

La evolución reciente permite estimar que el punto de inflexión puede estar próximo, en caso de no haberlo alcanzado ya, teniendo en cuenta el atraso que hay entre contagios en la vida real y cambios de rumbo en las medias estadísticas.

Los  nuevos positivos confirmados por PCR  son 141 elevan la incidencia acumulada semanal a  45,3. Este indicador ha subido en trece de los últimos dieciséis días. No estaba tan alto desde el dos de marzo.

Abriendo el foco, la incidencia acumulada bisemanal no era tan grande desde el 7 de marzo. Hoy crece de 85,9 a 87  a positivos por cada 100.000 gallegos en los últimos 14 días. Esta serie ha aumentado en  quince de los últimos 16  días.  

La tendencia general por lo tanto es de crecimiento de positivos del coronavirus en Galicia. Ahora bien, el crecimiento es bastante leve y, aunque ya se prolonga varias semanas, parece no estar acelerando. De hecho, se intuye una menor velocidad de subida en las últimas jornadas.

La tasa de positividad sigue controlada. Tras el  2% de ayer la media semanal continúa en el  2,3% , continuando una tendencia de leves altibajos, entre el 2,8%  y  el 2%, tendencia que dura ya más de un mes. 

SITUACIÓN DE LOS INDICADORES EN EL SEMÁFORO DE ALERTAS

Se puede concluir por lo tanto que Galicia no sufre escasez de PCRs para seguirle la pista al virus en sus niveles presentes. Cualquier porcentaje por debajo del 4% pone al país en el mejor de los niveles posibles del semáforo oficial de alertas en lo referido a la tasa de positividad.

Las dos incidencias acumuladas continúan en nivel medio, pero más cerca del nivel alto que del bajo. Desde hace varias semanas se están acercando lentamente pero casi sin pausa al nivel alto.

Ahora bien, en las últimas jornadas esta aproximación ha perdido brío. Por ejemplo, la curva de la incidencia acumulada semanal se está aplanando visiblemente. El ascenso de hoy es mínimo, de 45,3 a 45,5 casos por cada 100.000 gallegos a la semana. 

Si repitiera siempre el ritmo de hoy, la pandemia tardaría más de veinte y tres días en llegar a riesgo alto. Hace unas semanas, con el ritmo que llevaba, iba a tardar cinco o menos días. Esto da esperanzas de que Galicia doble su curva antes de llegar a 50 y nunca vuelva a riesgo alto.

EVOLUCIÓN DE LOS CASOS ACTIVOS

La derivada de la curva de casos activos nos confirma que el ascenso actual va perdiendo pujanza. Los casos activos caen hoy por tercera vez en los últimos 25 días, aunque sea poquísimo. De hecho, el total pasa de 3.016 a 3.015 casos activos. 

El -1 de hoy en términos absolutos equivale, redondeando, a una variación del 0%. En realidad una 'no variación' que ayuda a reducir la media móvil a siete días, el indicador más significativo, de +1,6% a  +1,2%. 

Este indicador continúa cayendo y acercándose a cero. Cuando la media semanal alcance cero significará que, desde una perspectiva semanal, los casos activos han dejado de crecer. Entonces podremos decir que esta cuarta ola era efectivamente una olita que logramos superar.

CONCLUSIONES

Con todas estas estadísticas para analizar, podemos inferir que:

• La pandemia está creciendo en Galicia. Con todo, su ritmo de crecimiento es cada vez más lento. En la batalla diaria entre nuevos positivos y nuevas altas, siguen ganando los positivos, pero la diferencia cada día es menor.
• Como los indicadores a siete y a catorce días no suelen cambiar de rumbo con facilidad y como todos están bajando o desacelerando, podemos estimar que Galicia está cerca del punto de inflexión de esta cuarta ola.
• El comportamiento de esta ola está siendo diferente al de las anteriores. La velocidad de ascenso nada tiene que ver con tragedias previas. Tampoco el nivel de hospitalizaciones o enfermos críticos. Lo que no quiere decir que la cuarta ola no tenga consecuencias. Por ejemplo, estamos ya en 45 enfermos críticos, cuando llegamos a tener menos de 30.
• En teoría, la vacunación de gran parte de las personas mayores y de todos los residentes es el principal factor para explicar este comportamiento peculiar, menos virulento. Al aumentar la vacunación, es de esperar que la virulencia baje  aún más.

DATOS POR ÁREAS

Vigo no es el área con más diagnósticos hoy, algo excepcional en los últimos tiempos. Lo es A Coruña, con 45. Buenos cómputos en Ferrol y Lugo, que se quedan por debajo de los 10 nuevos positivos.

A Coruña es la única área más de 10 enfermos en UCI. Sorprende que Vigo soporte un número elevado de casos activos, casi 900, y solo tenga 8 enfermos críticos. Algo que, de nuevo, podría explicarse gracias a la vacunación de los mayores, aunque también hay que valorar que el alza en Vigo es relativamente reciente, por lo que es esperable que la UCI olívica aún reciba más pacientes en los próximos días y semanas. Más datos a nivel municipal y de área sanitaria en unos minutos en Galiciapress.