(VÍDEO) Jesé y Tello anulan a Fran Escribá
El Celta cae por la mínima en Balaidos en un partido que dominó ampliamente el Real Betis.
El Celta cae por la mínima en Balaidos en un partido que dominó ampliamente el Real Betis.
No se cumplió el dicho de ‘Entrenador nuevo, victoria segura’ en Balaidos. Quizá porque, a la tercera vez que se dice en la temporada, se pierde todo el efecto y el sentido de la frase. Los de Fran Escribá cayeron ante el Real Betis por 0-1 en un partido en el que el cuadro andaluz superó ampliamente a los locales, que sucumbieron a diez minutos de final con un gol de Jesé.
En la primera parte el partido estuvo más o menos parejo. Los dos equipos dispusieron de ocasiones para adelantarse, especialmente echando mano de disparos lejanos que obligaron a Pau y Rubén a estirarse. Primero avisó Jesé, que se topó con una soberbia respuesta del guardameta celtiña; luego Maxi Gómez disparó cruzado pero desviado, evidenciando que tanto el charrúa como el Celta (tres partidos seguidos sin ver puerta) siguen con la pólvora mojada.
La entrada de Tello tras el descanso revolucionó definitivamente el encuentro. Los movimientos del bético se convirtieron en el quebradero de cabeza de Hugo Mallo, siempre superado por el de Sabadell. Pegado a la banda, Tello entró como un cuchillo por la siniestra, llegando siempre hasta línea de fondo y filtrando pases que se pasearon siempre por el área de Rubén.
El Celta se defendió como gato panza arriba de las embestidas verdiblancas, que hizo méritos para adelantarse en el marcador. La balanza terminó por desequilibrarse en el minuto 80, con un pase en profundidad que cazó Tello. El carrilero conectó un disparo potente que repelió Rubén, pero el rechace cayó en las botas de Jesé, que la empujó al fondo de la red. El VAR puso suspense al revisar la jugada, pero en todo caso, el gol del delantero del Betis subió al electrónico.
Los andaluces siguieron controlando el encuentro sin que el Celta tuviese una sola alternativa para intentar igualar, tónica general de un segundo tiempo en el que los celestes no inquietaron la meta de Pau. Las cámaras entonces comenzaron a enfocar a Iago Aspas, el único as en la manga que le queda a este nuevo Celta de Fran Escribá, que se fue de vació en su primera faena en la arena de Balaidos. Al final, el cuento de toda la temporada: cambiarlo todo para no cambiar nada. Espera el Bernabéu. Veremos quien anda peor.
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