Atribuyen esta situación a "las obras y los arrastres" por las precipitaciones.
Los últimos análisis en los municipios donde saltaron las alarmas revelan que los parámetros mejoraron.
Abel Caballero defiende que, aunque los resultados sobre la calidad del agua no se hacen públicos desde septiembre, se envían a la Xunta.
La Xunta atribuye el problema al mal funcionamiento de la potabilizadora municipal y el alcalde vigués garantiza la calidad del agua.