El empresario, de nuevo fuera del mapa, protagonizó en 2016 un episodio similar al que viven hoy los 260 trabajadores de Ambulancias do Atlántico cuando gestionaba Ambunova, entonces al frente del transporte no urgente en Santiago y O Barbanza. Impagos, ambulancias sin mantenimiento, dudas sobre si podrían repostar o no...la situación se repite 8 años después, con el empresario desaparecido y las mismas dudas sobre a dónde va a parar el dinero público que recibe la concesionaria. Los sindicatos sospechan, viendo el tejido empresarial del que forma parte Simón y por sus experiencias pasadas, que pueda existir un desvío de fondos por parte de la compañía a otras firmas.