Castro y Dastis mantuvieron un "encuentro cordial" en La Habana durante el viaje del ministro.
Exteriores justifica que el ministro estaba "de paso" en Quito, donde tuvo reuniones oficiales, antes de ir a Galápagos.
"No me parece una tragedia", afirma el ministro de Exteriores, que sostiene que criticar la emigración "es más propio de los años 60".