¿Cómo evitar las infecciones de orina en verano? Quirónsalud acerca consejos para prevenir la cistitis

Algunas personas padecen infecciones de orina con más frecuencia que otras y, en verano, más si cabe. Los ambientes húmedos por el calor o el sudor pueden estar detrás de esta patología que puede causar malestar e incluso llegar a ser incapacitante. Aunque los antibióticos son efectivos, lo mejor, según los expertos, es tomar cartas en el asunto y prevenir su aparición. Para ello hay una serie de recomencaciones que el doctor Pere Tudela, de Quirónsalud, acerca para tratar de evitar este tipo de infecciones. 

Dolor o escozor al orinar, dolor en la región lumbar o fiebre son algunos de los síntomas de la cistitis, la pielonefritis o la prostatitis. "En algunos casos, estos cuadros pueden evolucionar rápidamente a la sepsis, que supone el paso de los microorganismos a la sangre. Es la forma más grave y suele comportar una marcada hipotensión arterial con afectación importante del estado general", destaca el galeno, que enumera al E.coli o la Morganella como las eterobacterias responsables de esta dolencia. 

Existen factores de riesgo como la diabetes, la inmunodepresión, la menopausia o el embarazo que favorecen su aparición. "Las infecciones urinarias pueden tener diferentes formas de presentación, de gravedad variable, siendo en ocasiones difícil asegurar su pronóstico. No obstante, como reglas generales, la presencia de fiebre con escalofríos, dolor lumbar importante, dificultad para orinar o presencia de sangre en la orina, hacen sospechar procesos graves y por tanto aconsejan consultar en urgencias", detallan desde Quirónsalud. 

Una tira reactiva de orina puede arrojar más luz sobre el caso, pero también urocultivos o cultivos de sangre pueden descubrir la enfermedad, que se combate con antibióticos cuando los análisis así lo confirman. "Hay que recordar por otra parte, que la utilización de antibióticos indiscriminadamente tiene repercusiones trascendentes, como el error en el diagnóstico, la generación de microorganismos resistentes, así como los posibles efectos secundarios", subrayan desde la firma.

"Es importante distinguir entre infección urinaria e infecciones genitales (uretritis o vulvovaginitis) que pueden tener síntomas parecidos, pero que requieren de un enfoque y tratamiento diferentes. Por otro lado, la presencia aislada de un urocultivo positivo, en una persona sin síntomas urinarios, suele corresponder a bacteriuria asintomática, que habitualmente no requiere tratamiento. Estas situaciones pueden generar falsos diagnósticos de infección urinaria", comenta Tudela, que indica hidratarse, orinar con frecuencia -especialmente después de tener relaciones sexuales-, la higiene y el correcto secado de las zonas íntimas para evitar su aparición, así como la recomendación de usar prendas de algódon y ligeras, no muy ajustadas.