Salvador Illa rompe 14 años de ausencia catalana en el 12 de octubre: un gesto de normalidad democrática

Este 12 de octubre será recordado como un día histórico para Cataluña y España, con la vuelta del president de la Generalitat a las celebraciones del Día de la Hispanidad después de 14 años de ausencia. Salvador Illa, en un gesto que simboliza la voluntad de normalización y acercamiento, estará presente tanto en el desfile militar presidido por el Rey Felipe VI como en la recepción oficial. El último presidente catalán en asistir a estos actos fue el socialista José Montilla, en 2010.

Desde que fue investido como president, Illa ha dejado claro su compromiso con la institucionalidad y el respeto mutuo entre las diferentes administraciones del Estado. Su presencia en Madrid marca un cambio de etapa en las relaciones entre la Generalitat y el Gobierno central, un puente que busca tender de nuevo tras años de tensiones y distanciamiento. Este gesto no solo tiene un significado político, sino también emocional, reflejando un deseo de reconciliación entre Cataluña y el resto de España.

La portavoz del Govern, Sílvia Paneque, subrayó en una entrevista en Catalunya Ràdio que Illa acudirá a Madrid para "ocupar los lugares donde Cataluña debe estar presente". Este paso reafirma la voluntad del president de mantener un diálogo abierto y un respeto institucional que facilite la convivencia y el entendimiento.

Mientras tanto, en Barcelona, diversas organizaciones cívicas han convocado una manifestación para celebrar la "españolidad e hispanidad", con el objetivo de expresar su hermandad con los pueblos hispanos y rechazar lo que consideran una amenaza de opresión política.

Con este gesto, Salvador Illa se convierte en un símbolo de una nueva era de diálogo y respeto institucional, poniendo fin a una etapa de ausencia de la Generalitat en las celebraciones nacionales. Un hito que muchos ven como el primer paso hacia una convivencia más armoniosa y constructiva.