Detenidos en Ourense en redada contra red de explotación sexual que tenía esclavizadas a cinco mujeres
Agentes de la Policía Nacional han desmantelado una organización criminal presuntamente dedicada a la trata de seres humanos y a la explotación sexual de mujeres en un piso de citas en Ourense. Han liberado a cinco víctimas y han arrestado siete personas.
El operativo de la Policía Nacional se ha saldado con siete detenciones en Madrid y Ourense, donde intervinieron en el piso en el que explotaban a las mujeres.
Cinco de las víctimas, captadas en Colombia y Venezuela en situación de vulnerabilidad, fueron liberadas después de estar sometidas a un régimen de esclavitud: "No podían rechazar ningún servicio".
Agentes de la Policía Nacional han desmantelado una organización criminal presuntamente dedicada a la trata de seres humanos y a la explotación sexual de mujeres en un piso de citas en Ourense. Han liberado a cinco víctimas y han arrestado siete personas.
La operación se ha saldado con siete detenidos, dos en Madrid y cinco en Ourense, donde se han realizado dos registros domiciliarios y se han incautado más de 18.000 euros en efectivo, sustancias estupefacientes, dos teléfonos móviles y diversa documentación.
CAPTADAS EN SUDAMÉRICA
Según han informado desde la Policía Nacional este lunes, las mujeres eran captadas en Colombia y Venezuela a través de las redes sociales aprovechándose de su situación de vulnerabilidad y de necesidad económica para convencerlas de venir a España.
A partir de ahí les comunicaban cómo debían actuar para no levantar sospechas en la frontera y poder trasladarse hasta Ourense, donde les esperaba el cabecilla de la organización, que era quien les comunicaba una deuda de unos 3.000 euros y que iban a ejercer la prostitución en un piso de citas para pagarla.
Una vez en España, las víctimas tenían que estar disponibles las 24 horas al día de los siete días de la semana, sin libertad para salir sin ser escoltadas por un miembro de la organización y bajo constante vigilancia a través de cámaras de seguridad.
"No podían rechazar ningún servicio", de los cuales "recibían una ínfima parte de los beneficios, ya que les quitaban todo el dinero ganado para saldar su deuda", han explicado desde la Policía.
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