Galicia está afrontando un otoño excepcionalmente lluvioso con precipitaciones por encima de la media

En un giro climático notable, Galicia ha vivido un otoño marcadamente húmedo, con noviembre registrando lluvias significativamente por encima de lo habitual. De hecho, según informó este viernes el diario La Voz de Galicia, el municipio coruñés de Lousame superó los 700 litros por metro cuadrado, una cifra extraordinaria incluso para una de las zonas más lluviosas de la comunidad.

La delegación gallega de la Aemet informó que "noviembre fue muy húmedo, con un porcentaje de precipitación un 54 % superior a la media del conjunto de Galicia", especialmente en el interior de Pontevedra y el oeste de Ourense, donde las precipitaciones excedieron más del doble de lo normal para el mes.

Los datos proporcionados por Meteogalicia revelan una notable variabilidad en las precipitaciones acumuladas durante el mes de noviembre en la región a lo largo de los años. Desde el año 2008, las cifras oscilan significativamente, reflejando, en este caso, la diversidad climática gallega. Sin embargo, es el salto en el volumen de lluvias en 2023 lo que captura particularmente la atención, con un total de 503 litros por metro cuadrado.

Esta cantidad no solo supera la media de la década anterior, sino que representa un incremento considerable respecto al año 2022, donde se registraron 325,8 litros por metro cuadrado. Este aumento resalta una tendencia creciente en la intensidad de las precipitaciones, un fenómeno que podría estar vinculado a patrones climáticos cambiantes y que requiere una observación detallada para entender mejor sus implicaciones a largo plazo.

Diciembre parece seguir esta tendencia, con ayer registrando 76 litros por metro cuadrado en algunas zonas de Pontevedra. Esta constante humedad se atribuye a la posición meridional del anticiclón de las Azores, que habitualmente estabiliza el sur peninsular pero deja al noroeste expuesto a frentes atlánticos. La presencia del anticiclón en latitudes más bajas abre la puerta a borrascas atlánticas en Galicia, especialmente cuando coinciden con frentes cargados de humedad tropical, como ha sido el caso en los últimos meses.

SITUACIÓN DE ESTE SÁBADO

No obstante, se espera un cambio en la situación climática. A partir de este viernes, el anticiclón comenzó a ascender hacia el norte, marcando un cambio gradual pero significativo en la meteorología de la región.

Para este sábado, Aemet anticipa precipitaciones más débiles en las comarcas atlánticas de Galicia y una cota de nieve en torno a los 1.200 metros. Un frente cálido traerá lluvias débiles por la noche, extendiéndose de oeste a este, seguido de otro frente mañana que causará lluvias más intensas en la mitad occidental de Galicia.

Aunque las altas presiones no evitarán algunas borrascas el lunes y martes, el miércoles se espera que el anticiclón comience a dominar, actuando como un escudo contra bajas presiones y trayendo de vuelta el tiempo seco a Galicia.

Esta evolución meteorológica supondrá un cambio drástico, con un anticiclón que podría alcanzar una presión central superior a los 1.040 milibares, lo suficientemente fuerte como para mantenerse en la región. Sin embargo, esta configuración en diciembre podría provocar una notable caída en las temperaturas mínimas.

En cuanto al pronóstico para este sábado, se espera que un sistema frontal atlántico traiga cielos nubosos y precipitaciones a Galicia, siendo más intensas en el oeste de la región. El viento del suroeste podría provocar fuertes rachas en el norte de Galicia.

En conclusión, mientras Galicia se prepara para un cambio gradual en su clima, las condiciones de hoy reflejan el patrón de un otoño inusualmente húmedo y desafían las expectativas normales para la región.