Nico ya es el mariscal del Oporto de los españoles, que sigue la estela de Sporting de Lisboa

Llevó su tiempo, pero hablar del gallego Nico González en el Oporto es hacerlo de un jugador totalmente consolidado en O Dragao. El hijo de Fran, leyenda deportivista, vive su segunda temporada en el equipo blanquiazul y con la llegada de Vítor Bruno al banquillo del cuadro portugués se ha convertido en una pieza inamovible en el esquema del técnico luso, que ha dado la manija al coruñés para que el fútbol del equipo empiece y termine en sus botas. 

DRAGÓN CONTRA LEÓN

Y es que Nico se ha alzado como el dominador del centro del campo del Oporto. Después de llegar el pasado año a la ciudad y conquistar una Copa de Portugal, Nico ha dado un paso al frente y se ha hecho con la titularidad, que ya amarró el año pasado siendo parte del once en momentos decisivos como la final copera ante el Sporting de Lisboa.

Precisamente, los lisboetas son hoy la bestia negra de Nico, ya que su equipo solo ha besado la lona ante los verdiblancos este año: 2-0 en el José Alvarade, única derrota del curso hasta la fecha. Fue la venganza de los leones a la remontada del Oporto en la Supercopa conquistada contra pronóstico, ya que en el minuto 25 los sportiguistas dominaban 3-0 en el luminoso. Al final, y con un gol de Nico a la hora de juego, el Oporto se llevó el duelo en la prórroga por 3-4.

Ahora Nico y su Oporto siguen la estela del Sporting, líder del campeonato con seis victorias en seis encuentros. Con 18 puntos están hoy tres por encima del Oporto, donde Nico cuenta los partidos en titularidades -además de dos presencias con la sub-21 de España- y goles, como el que cerró la cuenta en el 2-0 ante el Rio Ave. Ya sea actuando como volante o en el doble pivote, las actuaciones de Nico hasta la fecha han sido siempre destacadas. 

Esta semana tendrá su debut en Europa League, un torneo sobre el que los lusos tiene depositadas muchas esperanzas, aunque en su camino se medirá a Manchester United, Lazio u Olympiacos, entre otros. Nico tiene ya dos títulos en Portugal y esta puede ser la campaña que lo catapulte definitivamente. Por ahora está dando el nivel que se le presuponía cuando debutó con el Barça, que ahora daría lo que fuese por tener entre sus filas a un metrónomo como el coruñés.