Alimentar a animales abandonados y recogerlos saldrá muy caro

Alimentar a gatos y perros abandonados en vías públicas sin permiso municipal será multado con hasta 500 euros, mientras que recogerlos supondrá una infracción grave si no se cuenta con la autorización correspondiente y esta práctica será sancionada con hasta 5.000 euros.

Así se recoge en el proyecto de Lei de Protección e Benestar Animal que acaba de iniciar su tramitación parlamentaria. Entre las novedades de la norma, además de las sanciones mencionadas, están la restricción de la eutanasia en los centros de acogida, que la Xunta prohibirá excepto en casos en los que permita evitar el sufrimiento de animales enfermos o que deban ser sacrificados por salud pública, razones de seguridad y medioambientales; la creación de hogares temporales como una nueva figura que contribuya a reducir la masificación de los refugios; la obligada esterilización de perros y gatos que, al salir de sus viviendas puedan tener contacto no controlado con otros; los límites a vender animales a menores de 16 años o el requerimiento de un permiso para tener más de cinco animales en casa.

También se prohíbe la mutilación con fines estéticos y los circos con animales silvestres al entender que conlleva maltrato y sufrimiento.