OFICIAL: ​El Celta, una máquina de triturar técnicos, cesa a Óscar García Junyent

El entrenador de Sabadell deja la disciplina celeste poco después de cumplir un año al frente del banquillo.

Ser entrenador del Celta de Vigo se ha convertido en un trabajo de riesgo. Desde la marcha de Eduardo Berizzo hace ya cuatro temporadas, ningún entrenador del Celta ha durado más de un año en el banco del club gallego. Óscar García es el último en sumarse a una lista de herederos del 'Toto' en la que están Juan Carloz Unzué, Antonio Mohamed, Miguel Cardoso y Fran Escribá.

El ya extécnico del Celta deja el cargo justo cuando se cumplía un año de su llegada a Vigo. Un año y cinco días después, Óscar deja a disciplina celtiña con un récord de 8 victorias, 17 empates y 13 derrotas. La permanencia conquistada el pasado curso no ha sido suficiente logro para salvar su cabeza este año, en donde un mal comienzo de curso ha llevado a la directiva del club a prescindir de sus servicios.

"El club transmite su más sincero agradecimiento, tanto al entrenador catalán como a sus colaboradores, por su trabajo, profesionalidad y esfuerzo demostrado durante su etapa en el RC Celta, en la que consiguieron certificar la permanencia en una complicada temporada 2019/20", indica el Celta en su web. 

La etapa de García ha estado marcado por la inestabilidad, tanto en el juego –provocado en gran medida por el bajo rendimiento de algunos jugadores llamados a liderar el club- como en los despachos y en el vestuario, ya que han sido muy sonadas sus riñas entre Felipe Miñambres, director deportivo, o Hugo Mallo, excapitán del Celta por decisión del propio Óscar. Las lesiones, una planificación deportiva cuanto menos deficiente o la crisis del coronavirus, con su consiguiente efecto sobre las arcas del club, también han lastrado la etapa del adiestrador.

Ahora, justo en el parón de selecciónes, el Celta debe idear una nueva hoja de ruta y definir a qué quiere jugar con las opciones que hay en el mercado. En los últimos días los nombres de Marcelino y Berizzo han sonado con fuerza, pero tanto el caché del asturiano como el contrato del argentino con Paraguay hacen muy complicado que se puedan abordar estas contrataciones.