Socios apalabran la venta del Centro Gallego y Argentina intenta pararla

El grupo Buenos Aires Servicios de Salud (BASA) ha presentado una oferta por la sede del histórico Centro Gallego de Buenos Aires. Eso si, BASA sólo ha informado de los detalles a las agrupaciones de socios verbalmente, según informaron a Galiciapress fuentes de la directiva electa.

Alejandro y Raúl Olmos, de Basa Salud, en la presentación de una de sus cabeceras | Colectivo de los trabajadores de prensa

La masa social está convocada a una asemblea en la que se votará la venta del inmueble de Belgrano (en la zona noble de la capital) este sábado. Según las citadas fuentes, tanto la directiva electa como algunas de las agrupaciones en las que se organizan internamente los socios le han dado luz verde.

Por lo tanto, en teoría, este sábado podría aprobarse que pasase a ser propiedad de una empresa. Está por ver que pasa con su patrimonio histórico y cultural, de un enorme valor simbólico para Galicia y España, pues el Centro fue la mayor institución de la emigración del país, con más de 110.000 socios.

ARGENTINA PROMETE 10 MILLONES, DEPOSITA SÓLO 3

Argentina también ha movido ficha. El estado albiceleste presentó una oferta de 10 millones de pesos (unos 200.000 euros) para paliar las deudas, pues a muchos trabajadores les deben hasta doce mensualidades. La credibilidad de la promesa se esvaneció poco después, cuando en vez de 10 millones sólo se concretaron 3.

Esto soliviantó aún más los ánimos de los asalariados. El viernes hubo un encierro y ayer miércoles otro:

La oferta del Estado "implicaba paralizar la concreción de la operación en marcha", según las citadas fuentes. En resumen, parece que se están dando pasos para sacar al Centro de su posible quiebra, sin que la Xunta ni España intervengan hasta ahora.

A este lado del Atlántico, las autoridades siguen mudas pese a la posibilidad de que se esvanezca una parte fundamental de nuestra historia. A nadie se le escapa que sin vender el céntrico predio, el Centro quebrará pronto.

Desentendiéndose del hospital -que llegó a tener 5 plantas y ahora está casi desmantelado-, Xunta y Estado sólo han mostrado interés por salvar el patrimonio cultural, compuesto por miles de volúmenes y una pinacoteca que es probablemente la más importante de pintores gallegos en manos privadas.

Ahora bien, hay que tener en cuenta que la directiva electa prometió que sólo daría luz verde a las ofertas que - además de salvaguardar de por vida la atención sanitaria a los socios, pagar los salarios a los trabajadores y finiquitar la monstruosa deuda- garantizase que el Centro siguiese con actividad cultural.

Está por ver en cómo se concreta por escrito la oferta y si los socios, muy divididos, la aprueban definitivamente, tras recibir luz verde preliminar de la directiva electa y de al menos algunas agrupaciones. En una pasada asemblea este año, ya rechazaron una propuesta de otro grupo, Ribera Salud.

¿PELOTAZO INMOBILIARIO?

Ramón Suárez, que ganó las elecciones hace unos meses, ha advertido que no tomará posesión oficial como presidente si no se concreta la oferta, que cree la unica vía para esquivar la desaparición. El Centro lleva años intervenido por la administración argentina, aunque los socios conservan el poder sobre la venta del patrimonio. El predio de Belgrano, a parte de su valor histórico, está en una zona céntrica de Buenos Aires.

Como es muy antiguo -y por lo tanto necesitaría una inversión enorme para modernizar el vetusto hospital- algunos trabajadores temen que detrás de la venta se esconda un pelotazo urbanístico.

BASA Salud es del grupo de los hermanos Olmos, que se dice líder en los sectores sanitarios y de comunicación -tiene varios periódicos y una televisión- pero también opera una inmobiliaria.