La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este lunes que la decisión del Tribunal Constitucional de prohibir la investidura de Carles Puigdemont si no asiste al Pleno del Parlament es una "buena noticia" y ha recalcado que "en absoluto" se siente cuestionada porque el Ejecutivo cumple con su "obligación".
Después de que Puigdemont haya dicho que pedirá autorización judicial para asistir al Pleno de investidura, la vicepresidenta le ha recordado que si viene a España, el TC ha dicho "clarísimamente" que tiene que "ponerse a disposición judicial". "Ese es el camino que tiene que seguir Puigdemont, el camino del Tribunal Supremo", ha apostillado.
Según ha explicado, el TC señala que no se puede celebrar un pleno de investidura sin la presencia "física" del candidato y que "el señor Puigdemont no puede ir a ese pleno sin ponerse a disposición de la Justicia".