Puigdemont no revela cuando volverá a España. Foto: @elinebreda
"No estoy aquí para pedir asilo político, estoy aquí porque es el corazón de Europa", manifestó este martes Puigdemont en una comparecencia en Bruselas, donde defendió que el Ejecutivo cesado se ha decidido por "la prudencia, la seguridad y la moderación" ante la aplicación del artículo 155.
Puigdemont explicó a los medios que "estamos aquí para buscar garantías que no se dan por el momento", denunciando que en el Estado no hay "un deseo de justicia, es un deseo de venganza".
Así, explicó que no tiene intención de "eludir a la justicia" pero no ha aclarado cuándo volverá a España y ha pedido "garantías" para hacerlo. Acompañado por parte de su Govern, señaló que "si hubiera garantías inmediatas de un tratamiento justo, si me permitiera un juicio justo, independiente, con separación de poderes, lo que vemos en la mayoría de países europeos, sin duda retornaría de manera inmediata".
El presidente catalán cesado anunció que desde Junts pel Sí "asumimos las elecciones convocadas por el Estado Español como un reto democrático, porque estamos totalmente de acuerdo que es votando como se resuelven los problemas".
En esta línea, manifestó que "nosotros vamos a respetar los resultados de las elecciones del 21-D, como siempre hemos hecho", para cuestionar "al Gobierno español si va a hacer lo mismo". "Quiero una respuesta clara", proclamó Puigdemont.
"Este Gobierno pudo optar por forzar a los funcionarios fieles a iniciar una disputa por la hegemonía, pero ha preferido garantizar que no habrá violencia", subrayó el ex presidente.
Sin embargo, también destacó que van a "apoyar las iniciativas en marcha para evitar que la aplicación del artículo 155 se lleve a la práctica y desmonte el sistema institucional catalán". Y dejó esta tarea en manos de los ciudadanos: "les pedimos que hagan todo lo posible para evitar la demolición, la gente que salvó los colegios el 1-O salvará nuestras instituciones".