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Los cuatro miembros de la célula yihadista de Cataluña han responsabilizado al imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, de los atentados y han precisado durante su interrogatorio ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que el religioso, fallecido en la explosión que tuvo lugar en la casa de Alcanar, les dijo que se quería inmolar con explosivos, según han informado fuentes jurídicas.


La fiscal del caso Ana Noé ha pedido prisión incondicional sin fianza para Mohamed Houli, Driss Oukabir, Mohamed Aalla y Said el Karib por los delitos de integración en organización terrorista, asesinato, estragos y tenencia de explosivos.


Según fuentes presentes en el interrogatorio, Mohamed Houli, el herido en la explosión de Alcanar, ha ratificado todo lo dicho ante los Mossos d'Escuadra, que el grupo preparaba un atentado mayor.


Según manifestó la policía catalana, Houli había aportado información valiosa para la investigación de los atentados. El avance de las pesquisas llevó a confirmar en estos días que el grupo terrorista estaba planificando desde Alcanar "uno o varios" atentados en Barcelona de forma inminente.


UNA MUDANZA


Por su parte, Driss Oukabir ha reconocido que fue él el que alquiló las furgonetas utilizadas en la matanza si bien creía que eran para una mudanza.


Se trata de la misma versión que Oukabir mantuvo en su declaración ante los Mossos en dependencias policiales si bien en el momento de su detención aseguró que su hermano Moussa Oukabir --uno de los cinco terroristas abatidos en Cambrils-- le había robado la documentación para el alquiler de los vehículos, según han informado fuentes presentes en el interrogatorio.


DECLARAN EL DUEÑO DEL AUDI Y DEL LOCUTORIO


Esta tarde declaran ante el juez, Mohamed Aalla, hermano de Said Aalla, que es el dueño del Audi A3 con el que los cinco terrorista abatidos atentaron en Cambrils.


Tras Aalla solo quedará por declarar Salh el Karib encargado de un locutorio en Ripoll donde fue detenido.



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