La Xunta ha denunciado la "elevada actividad incendiaria" registrada en las madrugadas de este fin de semana, en las que se contabilizaron un total de 29 incendios declarados entre las diez de la noche y las siete de la mañana.
Según el gobierno, 21 de los 29 incendios registrados de madrugada, cuando los medios áereos no pueden actuar, "quedaron reducidos a conatos", es decir, no afectaron a más de una hectárea.
A renglón seguido, el Ejecutivo gallego asegura que el tiempo medio de reacción frente a un fuego se situó "en torno a los 20 minutos". Además, denuncian que los incendios se declararon "con varios focos simultáneos en puntos próximos".
Así, ha puesto como ejemplo el "paradigmático caso" del Ayuntamiento de Agolada, donde "llegó a haber hasta diez fuegos en apenas 24 horas", de los que "cuatro quedaron en conatos" y "sólo uno" superó las 15 hectáreas de superficie afectada.
AGRADECIMIENTO A LOS PROFESIONALES
De este modo, la titular de Medio Rural ha agradecido el trabajo "a todos los profesionales que luchan contra los incendios forestales en Galicia, tanto al personal de la propia Xunta como de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Ejército y Protección Civil".
Por último, tras emplazar a la ciudadanía a denunciar a los incendiarios, recuerda que la época de peligro alto de incendios se extiende del 1 de julio al 30 de septiembre, un tiempo en el que estarán desplegados en la comunidad "unas 7.000 personas para luchar contra el fuego".
MÁS DE 160 HECTÁREAS EN UN PAR DE DÍAS
El incendio de Vilariño de Conso, iniciado en la noche del sábado, continúa sin controlar este lunes, aunque la Xunta lo da por "estabilizado" desde el domingo.
El fuego, que afecta a un centenar de hectáreas calcinadas, comenzó en la parroquia de Castiñeira, y en las tareas de extinción han participado cinco helicópteros, tres aviones, 13 motobombas, 31 brigadas, 10 agentes y una pala.
Por otra parte, a las 9,29 horas de este lunes ha quedado controlado un incendio en Vilalba, en la parroquia de Vilapedre, con unas 24 hectáreas quemadas. Trabajaron seis motobombas, ocho brigadas, tres agentes y un técnico.
Asimismo, en la noche del domingo quedó extinguido el incendio de San Cristovo de Cea, en la parroquia de Viña, que arrasó 38 hectáreas --30 de arbolado y ocho de raso--. En su extinción trabajaron 16 motobombas, 21 brigadas, 16 agentes, tres palas y un técnico.