El Concello de Lugo va a rescindir la adjudicación de dos casetas y dos calderos de pulpo del San Froilán por impagos de la empresa que ganó la subasta y que debería gestionar los puestos durante cuatro años. Sin embargo, Bruxa Consulting, que pujó por ellos más de 40.000 euros por encima del precio de salida, no ha abonado a Lugo el pago de este año.


El concurso fue polémico porque el precio prometido por la empresa madrileña dejó fuera a los hosteleros más tradicionales. El abono de este año debía haberse hecho en abril, por lo que el Ayuntamiento acordará en su reunión de mañana declarar extinguidas las autorizaciones y se quedará con la fianza depositada en su momento.


El Concello defiende que hay tiempo para volver a adjudicar los puestos y que no queden vacíos este 2017, con el perjuicio económico que supondría también para las arcas municipales. Desde la oposición, el PP ha pedido cambiar las bases del concurso para penalizar los posibles incumplimientos, pero el Ejecutivo local rechaza la modificación. 

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