El BNG ha iniciado, a través de su organización juvenil Galiza Nova, una campaña de fomento del uso del gallego que busca dotar de "herramientas" y "apoyo" a aquellos jóvenes que deciden "dar el paso" y cambiar el español por la lengua "propia" de Galicia.
"Es difícil, es un acto de rebeldía", ha indicado la diputada nacionalista Olalla Rodil este jueves en el acto de presentación de la campaña 'Rebélate. Fala galego', que ha tenido lugar en la Praza 8 de marzo de Santiago, donde ha estado acompañada por el secretario xeral de Galiza Nova, Alberte Fernández.
Allí, Rodil ha explicado que el objetivo de la campaña es "potenciar el uso del gallego entre los jóvenes", dado que, como arrojan los datos, "las franjas de edad más jóvenes están abandonando casi por completo" el empleo del idioma y "se está produciendo una fractura intergeneracional" debido a la falta de transmisión "de padres a niños de la lengua propia de este país".
Así, la diputada nacionalista ha apuntado que "en los últimos años" existen "muchas personas" que decidieron "dar el paso" y comenzar a hablar gallego cuando, hasta entonces, su lengua habitual era el español.
"ACTO DE REBELDÍA"
"Lo hacen en unas condiciones muy adversas porque no es fácil cambiar de idioma cuando fuiste educado en lengua española o cuando socializas. Es difícil, es un acto de rebeldía", ha manifestado Rodil.
Por lo tanto, con la campaña 'Rebélate. Fala galego' recorrerá los centros de enseñanza de Galicia para repartir información entre el alumnado con pautas a seguir a la hora de cambiar el castellano por el gallego.
Se trata, en palabras de Rodil, de "darle apoyo, ayuda y herramientas" a aquellos que quieran "transitar de la lengua española al gallego", así como de mostrarles que están "respaldados por una organización política" como el BNG. "La única forma de mantener viva nuestra lengua es hablarla día a día", ha apostillado.
Por su parte, el secretario xeral de Galiza Nova, Alberte Fernández, ha destacado que "dar el paso" de "en el contexto actual" empezar a emplear el gallego como lengua principal es "un gran acto de rebeldía contra un sistema que lo que busca es homogeneizar por completo la juventud y eliminar cualquier rastro de identidad diferenciada".
Así, tras enfatizar que el gallego "no es una cuestión limitante" sino que "abre muchos caminos", Fernández ha señalado que estas personas se encuentran con problemas como cierto grado de "discriminación" en ámbitos como el instituto u otros ambientes, donde existen "barreras" a la hora de emplear la lengua gallega como idioma habitual.