La Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático, a través de Augas de Galicia, ha comenzado a ejecutar esta semana actuaciones de conservación y mantenimiento en siete tramos de arroyos en el ayuntamiento de Ribadeo, que suman más de 12,6 kilómetros.

Las tareas, que se desarrollarán en varias parroquias del municipio lucense, consisten en la retirada de árboles caídos y biomasa presente en el canal fluvial para evitar taponamientos, así como desbroces puntuales y selectivos de acceso al canal.

En concreto, según ha detallado la administración autonómica, se actuará en un tramo de cerca de 2,6 kilómetros del arroyo de Vilaselán a su paso por las parroquias de Piñeira, Ove y Vilaselán; en alrededor de 2,3 kilómetros en el arroyo de Os Tacos (parroquia de Piñeira); en otro de 1,4 kilómetros en el arroyo de San Xulián, en las parroquias de Rinlo y Vilaframil, y de un cuarto, de más de 1,3 kilómetros, en el arroyo Cabalar a su paso por las parroquias de A Devesa y Vilaframil.

Los tres tramos restantes se sitúan todos en la parroquia de A Devesa. El primero, en algo más de un kilómetro, en un arroyo innominado; el segundo en el arroyo de A Rochela actuando en cerca de 1,9 kilómetros y el tercero en el arroyo de O Vilar, para algo más de 2 kilómetros.

Los trabajos, que ya fueron comunicados al ayuntamiento, se prolongarán durante unas cinco semanas y se realizarán mediante la aplicación de herramientas manuales, el uso de motosierras y desbrozadoras, así como con el apoyo de otra maquinaria de mayores dimensiones, como un tractor y una carretilla de carga.

El objetivo es que, una vez finalizadas las obras programadas por el organismo hidráulico dependiente del Ejecutivo gallego, este tramo fluvial quede despejado de maleza, posibilitando así la circulación fluida de sus aguas.

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