Archivo - Señal de una farmacia.

La Xunta de Galicia ha dado luz verde a un decreto que transforma el panorama de las farmacias en la comunidad. A partir de ahora, la cruz luminosa verde, símbolo tradicional de estos establecimientos, solo podrá encenderse durante el horario de apertura y las guardias, mientras que la publicidad de medicamentos y productos sanitarios queda vetada en plataformas digitales como redes sociales o páginas web. El anuncio, realizado tras la reunión del Consello de la Xunta este lunes, supone un cambio drástico en las normas que rigen al sector.

 

Seis meses para adaptarse al cambio

El conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, explicó que el objetivo de esta normativa, contenida en un documento de ocho artículos, es proteger la salud y la seguridad ciudadana frente a mensajes que incentiven el consumo de fármacos. Las farmacias tendrán un plazo de seis meses para ajustar sus prácticas a esta regulación, que reemplaza a una norma de 2008 y busca responder a los retos del entorno digital actual. Durante su intervención, Calvo sustituyó al presidente Alfonso Rueda, quien se encuentra de viaje institucional en Latinoamérica.

 

El decreto establece que las oficinas de farmacia solo podrán usar envoltorios, bolsas o su presencia en internet para mostrar datos básicos como dirección, teléfono o calendarios de guardias. Asimismo, se autoriza la promoción de servicios sanitarios aprobados por la Administración, pero queda prohibido cualquier contenido que fomente la automedicación o el uso de herramientas de autodiagnóstico en sus canales digitales.

 

La nueva regulación también permite a las farmacias difundir información general sobre el uso responsable de medicamentos, siempre que provenga de instituciones oficiales o colegios profesionales. Se podrán emitir boletines informativos y ofrecer tarjetas de fidelización, pero estos no deberán vincularse a fármacos ni productos sanitarios, una restricción que debe indicarse explícitamente. Los incentivos como descuentos o regalos quedan supeditados a lo que estipule la norma, cerrando la puerta a campañas comerciales amplias.

 

Cruz de una farmacia en una imagen creada con IA Grok

 

En paralelo, el decreto renueva las pautas para identificar estos negocios. Las farmacias y sus boticas anexas deberán señalizarse con una cruz griega o de malta verde, cuya iluminación se limitará estrictamente a los momentos en que estén operativas. Este cambio, que rompe con la costumbre de mantenerlas encendidas como reclamo permanente, ha generado debate en el sector durante la última semana.

 

Más allá de las farmacias: médula y polen

El Consello de la Xunta también aprobó otras medidas sanitarias. Entre ellas destaca la renovación del acuerdo entre la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue (ADOS) y la Fundación Josep Carreras, que facilita la búsqueda mundial de donantes de médula ósea compatibles con pacientes gallegos. Con un presupuesto de 885.000 euros, esta iniciativa prioriza el rastreo en España antes de recurrir a registros internacionales. En 2024, el Sergas llevó a cabo 213 trasplantes de médula, la mayoría autotrasplantes, aunque 29 dependieron de donantes localizados mediante este convenio.

 

Además, se ha autorizado un pacto entre la Consellería de Sanidade y la Universidade de Vigo, dotado con 174.240 euros, para monitorear la calidad del aire en Galicia. Este proyecto recogerá datos semanales sobre polen y esporas en Vigo, Santiago, Lugo y Ourense, información que se compartirá con la Dirección Xeral de Saúde Pública y la Red Española de Aerobiología. Estas acciones refuerzan el enfoque sanitario del Gobierno gallego, que combina restricciones y avances en esta nueva etapa normativa.


 

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