Un hombre ha aceptado una condena de tres años de cárcel al reconocer que traficaba con cocaína y hachís desde su vivienda en el municipio ourensano de O Barco de Valdeorras.
El acuerdo de conformidad se ha alcanzado antes del juicio señalado para la mañana de este miércoles en la Audiencia Provincial de Ourense.
De esta forma, el acusado, que se enfrentaba a una petición de pena por parte de Fiscalía de 4 años y un mes de cárcel, ha reconocido los hechos para pactar una rebaja de la condena hasta los tres años de cárcel.
Los hechos se remiten al mes de mayo de 2022, cuando el equipo de investigación de la Guardia Civil de la compañía de A Rúa tuvo conocimiento de que se estaba suministrando, en un inmueble de la localidad de O Barco de Valdeorras, sustancias estupefacientes a multitud de personas, siendo "un importante punto de venta en la zona".
Se inició entonces un operativo específico solicitando el juzgado de Instrucción de O Barco medidas técnicas de seguimiento y geolocalización. A raíz de la información obtenida mediante esos seguimientos, los agentes constataron que el acusado vendía en su vivienda estupefacientes, realizando muchas veces las entregas dentro de la vivienda, en el portal o en la calle, tras timbrar o quedar telefónicamente con los compradores.
Además, observaron que guardaba parte de la mercancía en un local denominado "El Dorado Plaza" a las afueras de la localidad de Valdeorras, que pertenecía a su familia y estaba sin actividad; por lo que podía disponer del mismo utilizándolo como "un lugar de seguridad", según el escrito fiscal..
Los agentes se encontraron dos básculas de precisión y sustancias de corte como paracetamol, ibuprofeno o ácido acetilsalicílico, así como las drogas. En concreto hallaron más de 34,65 gramos de cocaína en distintas cantidades y grados de pureza, así como más de 60 gramos de resina de cannabis y 14 gramos de cannabis con un valor de 83 euros.
Un acuerdo entre el fiscal y la defensa ha llevado al hombre a mostrar su conformidad, reconociendo todos estos hechos y que la sustancias eran para su posterior distribución a terceros; aceptando tres años de prisión y una multa de 5.300 euros.