¿Cómo podemos frenar la rueda de la desigualdad? Según Maquiavelo: “Los pueblos, de vez en cuando, si acaso alguna vez, se rebelan por causas razonables”
¿Cómo juegan los políticos para renovar el compromiso con la juventud de Galicia? Los partidos políticos tradicionales ofrecen “lo mejor que puede existir, imaginarse o desearse”, pero que lamentablemente no cumplen. Como decía Louis Dumur: “La política es el arte de servirse de los hombres haciéndoles creer que se les sirve a ellos”.
En España, el 27,8% de los adolescentes viven en hogares en riesgo de pobreza. Si no cambian las dinámicas sociales, políticas y económicas, los índices de pobreza seguirán aumentando, como una herencia que pasa de padres a hijos difícil de detener. En este contexto, la Unión Europea advierte que el ritmo de pérdida de jóvenes en Galicia es mucho mayor que el del conjunto de la UE. El envejecimiento poblacional agrava aún más esta situación.
La juventud gallega se enfrenta a diversos desafíos en su día a día. En casi la mitad del territorio gallego, las personas mayores de 60 años triplican a los menores de 20 años. Además, el índice de envejecimiento es alarmante. Según el Instituto Gallego de Estadística (IGE), las cifras poblacionales de referencia en Galicia, con datos cerrados a mediados de 2024, reflejan una tendencia demográfica preocupante en comparación con ejercicios anteriores. La zona rural es la más afectada por este despoblamiento.
¿Cómo podemos frenar la rueda de la desigualdad? Según Maquiavelo: “Los pueblos, de vez en cuando, si acaso alguna vez, se rebelan por causas razonables”. Quizá sea el momento de trabajar y proponer ideas para un cambio, planteando una serie de medidas que puedan traducirse en políticas públicas:
- Garantizar el acceso a la vivienda. La vivienda es uno de los grandes retos actuales. Para la población más joven, serían necesarias ayudas concretas y específicas que aseguren el acceso a una vivienda digna.
- Prevenir el fracaso escolar derivado de la pobreza o la exclusión social. Estos factores afectan negativamente al rendimiento educativo de los jóvenes, quienes, en muchas ocasiones, deben priorizar el trabajo para subsistir y no pueden continuar estudiando.
- Trabajar desde la orientación con las familias para evitar situaciones de abandono escolar.
- Mejorar las condiciones laborales, reforzar los servicios educativos y aumentar los salarios.
Estas son algunas de las medidas más urgentes que afrontar y que permitirían dar los primeros pasos hacia un cambio necesario.
La realidad de la juventud en Galicia, la necesidad de mejorar las políticas públicas que les afectan y el nuevo contexto social deben ser los objetivos prioritarios de nuestros Gobiernos.