Política Social considera que se trata de un modelo "referente" e incide en el incremento de la ratio de atención
La Confederación Intersindical Galega (CIG) ha reiterado este jueves su disconformidad con la nueva orden que regula los requisitos de los centros que atienden a mayores en la comunidad, asegurando que contribuye "al deterioro de las condiciones de trabajo en los centros de política social", ya que, entre otras medidas, suprime los servicios de enfermería en las grandes residencias, que pasan de ser de 24 horas a localizables, según ha informado el sindicato en un comunicado.
Asimismo, la CIG ha puesto el foco en los datos del Observatorio de Dependencia de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA) para cargar contra las medidas de Política Social, argumentando que 6.500 personas dependientes en lista de espera para entrar en un centro de Política Social fallecieron en Galicia entre 2017 y 2024.
En la misma línea, este sindicato denuncia que se mantiene el ingreso de personas con problemas psiquiátricos en residencias de mayores sin problemas de conducta, algo que el CIG considera que afecta "negativamente" a la convivencia y que "acelera" el proceso degenerativo.
La conselleira Fabiola García categorizó este nuevo modelo el pasado 18 de diciembre en el Parlamento como "referente" en el modelo asistencial español, afirmando que pretende "defender" los derechos de las personas mayores y "mejorar" tanto su calidad de vida como la de las personas que las cuidan. Desde la aplicación de esta orden hasta el 18 de diciembre, hubo un incremento del 98% de la ratio de atención, según la conselleira