Todo lo que hay que saber para el encendido de las luces de Navidad de Vigo: restricciones, entradas, controles...
viernes, 15 de noviembre de 2024, 12:55
La Navidad arranca este sábado, 16 de noviembre, en todo el planeta. El hemisferio norte presenciará un fogonazo a partir de las 20 horas con la iluminación simultánea de 11,5 millones de luces LED en 420 calles de la ciudad de Vigo, autoproclamada ciudad de la Navidad y ya un referente turístico en estas fechas desde que el alcalde, Abel Caballero, popularizó el alumbrado que tiene su arranque en el acto que protagonizará el sábado.
MEDIDAS, RESTRICCIONES Y ENTRADAS
Con miles de personas pensando en desplazarse a la ciudad olívica para el encendido de las luces el Concello de Vigo ha dispuesto un amplio dispositivo para garantizar la seguridad de los asistentes. El momento álgido será a las 20 horas, momento en el que comenzará el acto de encendido de las luces de Navidad, pero el acceso a la Porta do Sol estará controlado desde mucho antes.
La céntrica plaza será el centro neurálgico de la celebración pero estará delimitada este sábado por un perímetro que comprende Porta do Sol y sus calles aledañas. El gobierno municipal ha puesto la restricción de que el aforo máximo para esta ocasión sea de 7.000 personas. El recinto se cerrará a partir de las 15 horas del sábado y se restringirá el paso, con la salvedad de los pasillos perimetrales por los que podrán circular los peatones.
No será hasta las 17 horas que comenzará el control de aforo de personas que se acerquen al centro y se vigilará desde 17 puntos situados en distintas calles. Desde esas localizaciones se controlará el ingreso de los asistentes y el máximo de personas que podrán disfrutar del evento en la Porta do Sol. Las cuatro entradas se abrirán una hora más tarde, a las 18 horas, con los accesos en Doctor Cadaval, Carral, Policarpo Sanz y Príncipe. Por su parte, el acceso para personas con movilidad reducida y un acompañante hasta completar aforo en la zona reservada para ellos se hará por el punto de entrada de la calle Doctor Cadaval.
Como solo 7.000 personas podrán estar en la Porta do Sol, el Concello ha dispuesto dos pantallas gigantes para seguir el evento en Farola de Urzáiz y en Policarpo Sanz.
UN TONO MENOS FESTIVO, PERO DE RÉCORD
Cabe decir que, en esta ocasión, el tono no será tan festivo como en años anteriores. El propio Abel Caballero ha reconocido que, tras lo ocurrido en Valencia por los efectos hiperdestructivos de la DANA, la cita será "más sobria" que en otras ocasiones.
Pese al tono de respespeto a las víctimas, las previsiones para este fin de semana y los siguientes son muy buenas, con un nivel de ocupación que rozará el 100% en muchas fechas durante, al menos, casi dos meses. Si en 2023 las cifras ya fueron buenas en lo referido al impacto económico, Iván Sánchez, de la Asociación de Hostelería de Vigo se muestra confiado por el "pistoletazo de salida" de la temporada turística.
Sánchez destacó la tendencia de muchas personas de viajar por ocio entre semana a Vigo, aunque el grueso siga siendo, lógicamente, entre sábado y domingo. Con todo, igualar los datos de 2023 sería, a su juicio, "todo un éxito", pero que en esta ocasión, considerando que el año pasado los días 25 de diciembre y 1 de enero fueron un lunes o el "macropuente" de diciembre que hubo en 2023, será difícil igualar esos guarismos.
"La previsión es muy buena. Esperamos el encendido con toda la ilusión. Esto está para disfrutar. Hay elementos lumínicos nuevos muy bonitos que gustarán a los que vengan por primera vez y a los que ya han estado y repitan", zanja.
Las expectativas, en todo caso, están altas. Caballero anunció hace meses que el árbol sería más alto que el del año pasado, cuando el "rascacielos" de color alcanzó los 44 metros de altura. "Va a llegar a Marte. Le ganaremos a Elon Musk la carrera de quién llega primero a Marte: llegará el árbol de Navidad de Vigo", sentenció entonces Caballero, al tiempo que apuntó que en la misma plaza habrá "un gran bosque de Navidad" con árboles de ocho metros de altura.
VOCES CRÍTICAS
No será un día feliz para todos, igualmente. Grupos de vecinos, entidades sociales y plataformas ecologistas han puesto en solfa la Navidad de Vigo por el modelo turístico que promueve. Así, invitan a los afectados a colocar sábanas blancas en los balcones y ventanas a todos aquellos que consideren que la Navidad de Vigo representa "un exceso" y convierte a la ciudad en "un parque temático"
Alba Novoa, portavoz de la asociación vecinal Zona Centro de Vigo, consideró que no hay motivo para las celebraciones después de lo ocurrido en pueblos como Paiporta. "No es el momento de alardear con grandes gastos inútiles, grandes inauguraciones, villancicos, botellones en parques públicos, exceso de luces, espectáculos y atracciones de ferias", razonó, criticando el "empeño" de Abel Caballero con estas fiestas que llevan a algunos vecinos a vivir "una situación extremadamente difícil".
En esa línea, identifica como "una tortura" la experiencia de muchos vecinos que viven en las zonas donde se concentran más visitantes durante estos meses, con embotellamientos constantes en el tráfico y otras circunstancias desagradables por la "falta de medidas de seguridad que garanticen los tiempos de acceso y movilidad de los servicios de emergencias".
"Ruidos insoportables", suciedad, malos olores o los botellones en parques públicos y jardines son otros de los problemas que denuncian colectivos como a Federación Vecinal, Os Ninguéns, Ecoloxistas en Acción, VigoHistórico, ABIVE o la Plataforma frente a la Masificación Turística Vigo-O Morrazo, que marchó esta semana para denunciar el modelo de turismo de la ciudad y sus efectos sobre la vivienda.
"Nadie quiere acabar con la Navidad, pero estamos ante un concepto de la Navidad impuesto por el Ayuntamiento de Vigo que determina cómo hay que celebrar estas fiestas y condiciona los festejos de la ciudadanía. Un modelo que se ha terminado convirtiendo en un monstruo que atenta contra cualquier visión de un modelo de ciudad sostenible, respetuosa con el medioambiente, y con su patrimonio cultural", justificó Novoa.