Los populares mantienen que quieren dialogar hasta última hora, pero la oposición les acusa de querer "boicotear" el organismo

La comisión de investigación del Parlamento gallego sobre los contratos de la Xunta en pandemia y con empresas como Eulen, entre otros asuntos, aprobará este viernes por la tarde, a las 16.30 horas, su plan de trabajo. Con el objetivo de intentar alcanzar un acuerdo 'in extremis', el PP, el BNG y el PSdeG mantendrán por la mañana un encuentro propuesto por los nacionalistas.

La mesa de la comisión se ha reunido este jueves, a partir de las 14.30 horas, después de un primer intento el martes que fue impugnado por el Bloque al no haber transcurrido 48 horas desde su convocatoria. Los desencuentros entre PP y BNG sobre este asunto se acrecentaron a partir del miércoles en el pleno, cuando la líder del Bloque, Ana Pontón, acusó al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y a los populares de querer "imponer" su plan de trabajo.

En cualquier caso, la mesa ha acordado finalmente que la sesión de la comisión se celebre el viernes con un único punto en el orden del día: aprobar esa hoja de ruta que incluirá la documentación que se solicitará y las personas que estarán llamadas a comparecer en el Pazo do Hórreo. Si no se llega a un consenso, lo previsible es que el PP saque adelante en solitario su propuesta de plan, porque solo se requiere mayoría absoluta.

La mesa la integran dos miembros del PP --la presidenta, Elena Candia, y la vicepresidenta, Carmen Pomar-- y uno del BNG --el secretario, Luís Bará--. A la salida, el representante nacionalista ha manifestado su malestar ante los medios porque en este órgano las representantes del PP no estaban dispuestas "a negociar nada" pese a que el orden del día hablaba de la "elaboración de la propuesta del plan de trabajo", sino que elevarán a la reunión de la propia comisión "una propuesta unilateral".

Bará insiste en que el BNG "tendrá algo que decir" en este tema "como grupo proponente" de esta comisión, la cual el PP pretende "boicotear" y "adulterar". Es, a su juicio, "un abuso de la mayoría" con la que los populares "no quieren que venga" ni Alberto Núñez Feijóo, como expresidente de la Xunta, ni representantes de empresas que contrataron con la administración.

Ya en la tarde de este jueves, el BNG enviaba al resto de grupos --PP, PSdeG y Democracia Ourensana-- una propuesta para mantener un encuentro, a partir de las 9.30 horas de la mañana, con el objetivo de "agotar todas las vías de diálogo" y armar ese plan de trabajo con negociaciones "hasta el último minuto".

Fuentes de los grupos Popular y Socialista consultadas por Europa Press confirman que acudirán al encuentro. El representante de Democracia Ourensana y diputado del Grupo Mixto, Armando Ojea, no podrá porque tiene pleno en el Ayuntamiento de Ourense.

EL PP ESTABA "ESPERANDO"
Tras recibir la propuesta del BNG por la tarde, fuentes del PP insisten en que estaban "esperando" a que llamasen a su portavoz, Alberto Pazos, para iniciar el diálogo. Bará desveló el miércoles que hubo varios contactos telefónicos, pero por diversos motivos la negociación no llegó a empezar.

Sea como fuere, los populares mantienen su voluntad de acordar el plan hasta el último momento, pero recalcan que su propuesta, "como grupo mayoritario", debe ser la base. Además, la secretaria general, Paula Prado, volvía a acusar al BNG de "intentar frenar" el trabajo de este organismo.

El PP registró el lunes de la semana pasada su propuesta, que consta de 118 solicitudes de documentación (informes de fiscalización y de carácter económico-financiero, sobre todo) y 39 comparecencias.

Entre ellas, está incluida la del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, pero no la de Alberto Núñez Feijóo Feijóo, que sí demandan PSdeG y BNG igual que de familiares del exmandatario gallego, como su hermana, Micaela Núñez Feijóo, por ser directiva en Eulen; y su prima Eloína Núñez, exgerente del área sanitaria de Santiago-Barbanza.

El PP apunta también a Salvador Illa y a varios exconselleiros de Sanidade desde el 2005: María José Rubio (del bipartito), Pilar Farjas, Rocío Mosquera, Jesús Vázquez Almuíña, Julio García Comesaña (todos ellos titulares de Sanidade bajo mandato popular) y el responsable actual del área, Antonio Gómez Caamaño.

También piden la comparecencia de las extitulares de Facenda con Feijóo Marta Fernández Currás y Elena Muñoz, así como del actual, Miguel Corgos; y de María José Caride, quien fue conselleira de Política Territorial cuando Emilio Pérez Touriño dirigía la Xunta. El PP también quiere citar otros cargos del bipartito, por ejemplo Rubén Cela, ex director xeral de Xuventude y dirigente destacado del BNG actual.

ÚLTIMA PROPUESTA DEL BNG
En las propuestas de BNG y PSdeG figuran Rueda, Feijóo y familiares de este último, así como Tomás Díaz Ayuso y Alberto González Amador, hermano y pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. A mayores, los socialistas proponen a la secretaria general del PPdeG, Paula Prado, y a su marido en condición de socio de Allwork Vestuario Laboral por los contratos que firmó con la Administración autonómica.

Además, Luís Bará (BNG) propuso este jueves en la reunión de la mesa de la comisión sobre "los chanchullos del PP en las contrataciones" --según la denominan los nacionalistas-- que hubiese un máximo de 70 comparecientes.

De todos ellos, 20 se escogerían con el apoyo de "como mínimo dos grupos parlamentarios". Las otras 50 se repartirían entre los partidos "atendiendo a un sistema de cuotas", es decir, en función de su representación. Asimismo, el BNG piden que ningún grupo pueda vetar comparecientes.

Su propuesta también establece plazos para las distintas fases del proceso: 20 días para la de documentación, tres meses para comparecencias y otros tres meses para elaborar un dictamen, que sería flexible si se solicitasen más documentación y comparecencias.

"LA INCOMODIDAD" DEL PP
La mesa de la comisión no cuenta con ningún representante del PSdeG, que no obstante denuncia los "intentos del PP de dificultar" la labor de la comisión y de "evitar ser fiscalizado", lo que demuestra su "incomodidad con la transparencia".

Para que los gallegos "sepan como se gestionan sus recursos", los socialistas quieren que comparezcan en el Parlamento "todas las personas citadas por los partidos". "No daremos un paso atrás hasta que la verdad se conozca y se depuren todas las responsabilidades. Para nosotros, este es el momento de poner fin a las sombras en la gestión pública", subrayan fuentes del Grupo Socialista, consultadas por Europa Press.

El PSdeG también asegura estar a la espera del informe jurídico que esgrimió la popular Elena Candia, presidenta de la comisión, para argumentar el rechazo del PP a varias enmiendas de la oposición durante el debate de las normas de funcionamiento de este órgano hace varias semanas, incluidas aquellas para que el plan de trabajo se tuviese que elegir por mayoría cualificada y no únicamente por la absoluta.

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