Una de las principales fuentes de Omega-3 es el pescado. ¿La potencia pesquera de Galicia, jugó algún papel relevante a la hora de escoger As Somozas como lugar para ubicación de la planta?
No hay duda de que Galicia es una potencia pesquera, pero en este caso fue la cercanía con el puerto de Ferrol lo que hizo de As Somozas el lugar idóneo para levantar esta planta de producción de Omega-3. Trabajamos con varios proveedores locales y también tenemos suministradores de aceite de pescado en países como Perú y Chile por lo que la logística portuaria es muy importante.
¿Cuáles son los principales procesos productivos que se llevan a cabo en esta planta para la extracción y refinamiento del Omega 3?
En nuestra planta de As Somozas llevamos a cabo varios procesos para obtener aceites de Omega-3 de la máxima calidad. Recibida la materia prima procedemos a hacer un refinado para eliminar ácidos grasos libres, gomas y mucílagos, así como pastas y residuos. A continuación, hacemos un blanqueo, que consiste en la filtración y eliminación de contaminantes. Finalmente terminamos con el proceso de desodorización con el que producimos un aceite Omega-3 Premium sin regusto ni olor a pescado.
¿De dónde proviene el pescado que usan para el Omega-3? ¿Cómo aseguran la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente en las fuentes de obtención de Omega 3?
Para la elaboración de los aceites Omega-3 se emplean pescados azules como la anchoveta, que no se dedica al consumo humano directo, sino que son procesados en harina y aceite de pescado en las propias embarcaciones que los capturan. Nosotros utilizamos esas especies sin valor comercial y las transformamos en un producto de alto valor añadido, en este caso aceites Omega-3.
Natac es una empresa con un elevado perfil sostenible en todos los procesos del ciclo productivo, desde la selección de la materia prima hasta la producción de los aceites Omega-3. Además, somos socios de GOED (The Global Organization for EPA and DHA Omega-3s), asociación sectorial que promueve las buenas prácticas en el sector.
¿Qué avances tecnológicos han incorporado recientemente en la planta que han mejorado la eficiencia o calidad del proceso productivo?
Como compañía siempre buscamos la máxima eficiencia de los procesos y lograr el producto de la mayor calidad, en este caso aceites Omega-3. Para ello utilizamos tecnología de última generación, como pueden ser los sistemas de alto vacío e inertización para alcanzar un producto de la más alta calidad.
Disponemos de las certificaciones más actuales y reconocidas para cada uno de nuestros mercados como son la FSSC 22000, la ISO14001 o los certificados Kosher y Halal
¿Qué importancia tienen las certificaciones internacionales (como GMP, ISO, entre otras) en su planta y cómo afectan a su operación diaria?
Las certificaciones de calidad son un requisito imprescindible para el suministro a los mercados de alimentación. En Natac operamos todas nuestras plantas siguiendo los más altos estándares de calidad. Disponemos de las certificaciones más actuales y reconocidas para cada uno de nuestros mercados como son la FSSC 22000, la ISO14001 o los certificados Kosher y Halal, entre otros.
¿Cuáles son las proyecciones de crecimiento o expansión para la planta en los próximos años? Dado el incesante crecimiento de la demanda de Omega-3, ¿sería factible ampliar la factoría en As Somozas o habría que buscar otra ubicación?
Efectivamente la demanda mundial de Omega-3 está creciendo a un ritmo superior al 7% anualmente debido a que la sociedad es cada vez más consciente de la importancia del cuidado preventivo de la salud y los productos naturales. Nuestra planta de As Somozas, la más grande de España, tiene capacidad suficiente para hacer frente a ese aumento esperado de la demanda.
¿Cuántos puestos de trabajo directos e indirectos genera la planta en la actualidad? ¿Estará a máxima capacidad de producción desde ya o se irá aumentando, y también los puestos de trabajo?
La capacidad de producción de la planta se irá incrementando de manera gradual y cuando esté a pleno rendimiento estará operada por 35 empleados. En la actualidad hay 17 trabajadores que proceden de la zona con lo cual estamos ayudando a fijar población en este entorno rural y contribuyendo a generar prosperidad económica y social en la región.
Los beneficios comprobados del omega 3 y sus usos en la salud
El omega-3 es un tipo de ácido graso esencial que el cuerpo humano no puede producir por sí mismo, lo que significa que debe obtenerse a través de la alimentación. Se encuentra en ciertos alimentos como pescados grasos (salmón, atún, sardinas), semillas de chía, linaza y nueces. También existen suplementos de omega-3 en forma de cápsulas de aceite de pescado o algas. La importancia de este nutriente ha sido confirmada por múltiples estudios científicos que avalan sus beneficios para la salud en diversas áreas.
Uno de los principales beneficios del omega-3 es su impacto positivo en la salud cardiovascular. Se ha demostrado que el consumo regular de estos ácidos grasos reduce los niveles de triglicéridos en la sangre, un tipo de grasa que, en exceso, puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas. Además, el omega-3 contribuye a disminuir la presión arterial y a mejorar la elasticidad de los vasos sanguíneos, factores que ayudan a prevenir enfermedades coronarias. Las investigaciones también señalan que este nutriente favorece la disminución de la formación de placas en las arterias, reduciendo el riesgo de aterosclerosis y accidentes cerebrovasculares.
Un campo en el que el omega-3 ha mostrado efectos beneficiosos es en la salud cerebral y cognitiva. Diversos estudios indican que estos ácidos grasos son esenciales para el desarrollo adecuado del cerebro, especialmente durante el embarazo y los primeros años de vida. En los adultos, el omega-3 ha sido vinculado a una mejor función cognitiva, ayudando a prevenir el deterioro asociado al envejecimiento y reduciendo el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. Además, se ha encontrado que el consumo adecuado de omega-3 puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo, ayudando a combatir síntomas de depresión y ansiedad.
El omega-3 también tiene propiedades antiinflamatorias, lo que lo convierte en un nutriente valioso para el manejo de diversas condiciones crónicas que implican inflamación, como la artritis reumatoide. En personas con esta enfermedad, se ha observado que el omega-3 puede ayudar a reducir la rigidez articular y el dolor, mejorando la calidad de vida. Su acción antiinflamatoria también puede contribuir a reducir la inflamación en los intestinos, ayudando a personas que sufren de enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn.
Otro uso importante del omega-3 es en la salud ocular. La retina del ojo contiene una alta concentración de DHA, un tipo de ácido graso omega-3. Los estudios han demostrado que el consumo adecuado de este nutriente puede ayudar a prevenir la degeneración macular, una de las principales causas de pérdida de visión en adultos mayores. Además, el omega-3 contribuye a mantener una correcta producción de lágrimas, lo que puede aliviar el síndrome del ojo seco, una afección común en muchas personas.
El impacto positivo del omega-3 también se extiende a la piel. Al ser un componente clave de las membranas celulares, estos ácidos grasos ayudan a mantener la hidratación y elasticidad de la piel, previniendo problemas como la sequedad o la aparición de arrugas prematuras. Además, su capacidad antiinflamatoria puede ser útil para personas que padecen de afecciones cutáneas como el acné o la psoriasis.
En resumen, el omega-3 es un nutriente esencial con múltiples beneficios comprobados científicamente para la salud cardiovascular, cerebral, articular, ocular y cutánea, entre otros. Ya sea a través de la dieta o suplementos, su consumo adecuado es clave para mantener un buen estado de salud y prevenir diversas enfermedades.