Verín cerró 2023 con la nueva planta de biorresiduos funcionando ya a pleno rendimiento y con cerca de una quincena de municipios beneficiándose de la gestión y tratamiento de los despedicios que ofrece Sogama. Con el acuerdo alcanzado entre la empresa pública y la Deputación de Ourense, que delegó la recogida de residuos en la firma, Sogama amplía su red, llegando a cada vez más rincones de la comunidad.
PRESENCIA EN LAS CUATRO PROVINCIAS
El sello de la acuerdo de adhesión corrió a cargo de Luis Menor, presidente del ente provincial, y Javier Domínguez, presidente de Sogama, "en cumplimiento de la normativa europea vigente". Este pacto permite la recogida diferenciada de la materia orgánica, a través de los contenedores marrones ya localizados en el entorno de establecimientos como restaurantes o colegios. Solo en el último mes del año se entregarón más de una tonelada y media de desperdicios que serán convertidos en abono.
Con la planta de Verín, se cierra un objetivo que era contar con plantas de estas características en las cuatro provincias. Cerceda, Cervo y Vilanova de Arousa, junto con Verín, completan este grupo, al que hay que añadir las trece plantas de transferencia para una inversión total de 45 millones de euros.
"El compost obtenido será utilizado posteriormente en el sector de la agricultura y la jardinería, dados sus importantes beneficios para el suelo por su aportación de nutrientes y su capacidad protectora frente a plagas y enfermedades", señalan desde la Deputación, que celebra este acuerdo con el que proyectan prestar también servicio a los vecinos y vecinas de la zona, con el propósito de iniciar "una campaña de mayores dimensiones para que los ciudadanos sepan qué deben depositar en el contenedor marrón, qué tratamiento recibirá ese material y cuál será destino del producto resultante".