Se inicia una semana en la que Barcelona se vestirá de fiesta para vivir un año más la Mercè que se iniciará este viernes. Un año especial, en el que los barceloneses y demás visitantes podrán disfrutar de las actividades que hay programadas, que son unas cuantas y para todos los públicos. Unas fiestas muy especiales.
Este lunes, las relaciones del Ayuntamiento de Barcelona con la Casa Real se han restablecido después de 17 años, siendo alcalde el socialista Jordi Hereu, quien fue recibido en el palacio de la Zarzuela. En esta ocasión, el actual Jaume Collboni ha querido volver a la normalidad democrática y de cortesía con el Rey Felipe VI que ha sufrido en todos estos años la descortesía de los alcaldes, Xavier Trías y Ada Colau, sin tener en cuenta que la educación, el respeto y las obligaciones del cargo les obligaban a cumplir con sus deberes.
Quizás el gesto del alcalde Collboni de volver a la normalidad con el Rey ha molestado y de qué manera a Xavier Trías, quien, por cierto, hacía solo dos días se había ofrecido al alcalde para entrar a formar parte del gobierno municipal, y en una entrevista radiofónica, lanzaba una acusación grave al manifestar que los socialistas estaban detrás del golpe de Estado del 23-F. Lo ha dicho y se ha quedado tan tranquilo. ¿Tiene pruebas? No, solo lanza la acusación para ver si lía más la troca, como si ya no lo estuviera. ¿Es una pataleta del aspirante a alcalde? Sí.
Xavier Trías, una persona que siempre había mostrado un perfil conciliador, dialogante, sin estridencias en sus discursos y moderado, hace tiempo que ha sufrido una transformación ideológica que preocupa a los que le conocen. Con eso del procés y los cambios de su partido, Trías se volvió independentista - situación que descolocó a unos cuantos-, después quedó relegado, casi “jubilado”. Con la bajada de votos y con las elecciones municipales a la vista, el exalcalde convergente, fue elegido para encabezar la lista. Eso sí, escondiendo las siglas de Junts. Con un discurso moderado, volvió a ganarse la confianza de un buen número de barceloneses que le hicieron ser el ganador de las municipales. Lo que no le permitió recuperar la alcaldía, cosa de los pactos. Eso le llevó a desbarrar la misma noche electoral, llegando a manifestar que dejaba el ayuntamiento por la jugada de los socialistas que poco más o menos venía a decir que le habían “quitado” su sillón.
Xavier Trías después de la vuelta de vacaciones, anunciaba que iba a seguir en el Ayuntamiento como concejal. Osea que se desdijo de lo que había dicho en el mes de mayo. Ahora le coge la rabieta y la vuelve a montar parda con las acusaciones a sus “amigos” socialistas que le pueden traer complicaciones si no no tiene pruebas. Parece mentira que una persona “sensata” pueda decir lo que ha dicho. ¿Tiene algún problema de salud Trías? ¿Es un tema de edad? Trías tiene 77 años, alguna enfermedad, pero no es como para que siga diciendo y haciendo cosas que no se corresponden con su anterior trayectoria política.
Trías, con un bagaje político anterior bueno, no puede seguir por ese camino: ganar un prestigio es cosa de años pero para quedarse sin él basta con unas cuantas declaraciones que suenen a revancha. Lo mejor que puede hacer ahora es marcharse a su casa. Los experimentos, también en política, se hacen en casa, sin que se enteren los medios de comunicación. La política también es el arte de tragarse unos cuantos sapos y no atragantarse. Trias se está equivocando demasiadas veces, por desgracia.