Un fuerte terremoto de magnitud 7,8 en la escala Richter ha dejado al menos 235 muertos y más de 1.500 heridos en Ecuador, según los últimos datos facilitados por el Gobierno. El Ejecutivo ha decretado en todo el país el estado de excepción y ha dado la orden de movilización al ejército.
El temblor también se sintió fuerte en Quito, capital de Ecuador. Ocurrió a las 18.58 hora local. El epicentro fue en el océano Pacífico a una profundidad de 20 kilómetros, a 28 de la costa ecuatoriana y a 173 de Quito. Las réplicas se han sentido durante toda la madrugada y han llegado a alcanzar una intensidad de 6,1 grados.
Los mayores daños se registran en las zonas de Pedernales y Cojimíes (Provincia de Manabí), según el Instituto Geofísico de Ecuador. Los reportes de las redes sociales dan cuenta de que hay ciudades sumidas en la oscuridad y afectadas por derrumbes. Igualmente hay daños en puntos distantes del epicentro como Guayaquil, donde hubo derrumbes en centros comerciales y vías. Además se ha cerrado el aeropuerto de esta ciudad. En Esmeraldas no hay comunicaciones telefónicas. Radios locales han contado que durante el terremoto se escuchó un estruendo en una refinería local.