El Congreso de los Diputados deliberará esta semana sobre la Ley de Pesca Sostenible e Investigación Pesquera. Entre los objetivo de esta ley se encuentra fortalecer la conservación y el uso sostenible de los recursos pesqueros, apostando por un uso más eficiente y flexible de las cuotas pesqueras.
El texto, aprobado en Consejo de Ministros el pasado mes de mayo, pasó ya la semana pasada por su fase en ponencia y ahora proseguirá su tramitación en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación el lunes y, ya en el Pleno del Congreso, el jueves, para su remisión al Senado.
La nueva normativa pesquera pretende procurar que esta actividad contribuya a la creación de empleo, a la generación de riqueza y a la cohesión social de las zonas costeras de España, así como el fortalecimiento del vínculo entre la ciencia y la creación política en esta materia.
Concretamente, la aprobación de esta nueva normativa está integrada en el compromiso programático que adquirió el Gobierno y que se sustenta en actualizar la Ley de Pesca Marítima del Estado, promulgada en el año 2001, para adaptarla a la situación y realidad actuales del sector, incorporando todas las novedades legislativas de ámbito comunitario y sobre la gobernanza de los océanos producidas en las últimas dos décadas.
La nueva ley introducirá la facultad de adoptar medidas para fortalecer la conservación y el uso sostenible de los recursos pesqueros, como es el caso de la limitación del tamaño de las capturas o la regulación del refuerzo pesquero, de las artes y aparejos utilizados, del peso o la talla de las especies, o del establecimiento de vedas.
Asimismo, esta ley pretende potenciar las medidas de defensa y regeneración de los recursos pesqueros como la declaración de zonas de especial protección o la introducción de medidas preventivas de actividades susceptibles.
JUBILACIÓN DE REDERAS Y MARISCADORAS
La nueva norma incluye también coeficientes reductores para la edad de jubilación de algunos colectivos de trabajadores del ámbito del mar y pequero, cuyas profesiones son de gran desgaste.
De esta forma, las rederas, neskatillas y empacadoras, ocupaciones desarrolladas en su mayoría por mujeres y que tendrán ahora un coeficiente reductor de la edad mínima para percibir la pensión de jubilación del 0,15.
También se tendrán en esa consideración a las mariscadoras de a pie, que se equiparan así con los mariscadores de a flote, y los buceadores profesionales. Una medida de la que se podrían beneficiar cerca de 5.300 trabajadores del sector pesquero.