La falta de entendimiento entre la dirección y el Comité de Empresa de Megatech está repercutiendo en la salud de los empleados, llegando a producirse "bajas por estrés y ansiedad".

 

Megatech tiene entre sus clientes a las marcas Peugeot y Citroën, por lo que si se agrava la crisis en la planta de Pereiro de Aguiar podría verse afectada la producción de Stellantis en Vigo, que ya acusa parones por la crisis de los microchips. 

 

Megatech | Foto: Cluster de Empresas de Automoción de Galicia

 

El Comité de empresa de Megatech en Ourense ha anunciado una concentración para el martes, día 27, delante de su sede en el polígono de Pereiro de Aguiar, para reclamar unas condiciones de trabajo dignas.

 

El Comité ha indicado en un comunicado que existe una "muy alta carga de trabajo" en la factoría que "obliga al personal "a hacer innumerables esfuerzos que, de ninguna forma, se ven recompensados por la dirección de empresa". Aseguran que está causando incluso bajas por estrés y ansiedad entre los compañeros.

 

Con esta movilización reclaman a la empresa un cambio de actitud, que, aseguran, "se ha cerrado a entrar en cualquier tipo de negociación para la mejora de las condiciones de sus trabajadores". El Comité asegura, asimismo, que existe por parte de la empresa "un trato inhumano" hacia los trabajadores.

 

CLIENTES QUE PUEDEN RESULTAR AFECTADOS

Uno de los clientes de Megatech, la empresa Stellantis de Vigo, se podría ver afectada por las movilizaciones de los trabajadores. Stellantis y sus marcas Peugeot o Critoën reciben piezas de Megatech, por lo que una hipotética huelga en la factoría auriense pondría todavía más difícil la producción en plantas como la de Balaídos, que desde hace más de dos años registra parones de forma constante por la falta de aprovisionamiento condicionado a la crisis de los microchips. 

 

Sin ir más lejos, este mismo fin de semana están programados parones para el sábado y el domingo. Si a esto añadimos eventuales retrasos en la entrega de otras piezas necesarias para la producción de los vehículos, la fábrica de Vigo podría verse obligada a tomar decisiones todavía más duras que podrían afectar a la plantilla.  

 

De igual manera, si a falta de estabilidad del suministro de estos componentes sumamos a las movilizaciones de los trabajadores de Megatech, podría hacer entrar a la sede de Stellantis en Vigo en una mayor crisis productiva.

 

Otras clientes sede ourensana de Megatech también se podrían ver afectados. Podría afectar, entre otras, a la producción de grupos como Audi, Porsche, Seat, Skoda o Volkswagen.

 

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