El presidente de la Xunta y líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido, tras el posicionamiento de barones como el ourensano Manuel Baltar o el coruñés Diego Calvo, a favor de un congreso para elegir a su sucesor en el partido, que las opiniones son "perfectamente legítimas", pero ha dejado claro que no está cerrada la vía para el relevo y que "todo se hará conforme lo que desee el PPdeG".

"Vamos a cumplir todos los plazos y haremos lo que digan los Estatutos del partido, que es lo que toca", ha advertido, en declaraciones a los medios en los pasillos de la Cámara, donde ha asegurado que no siente "ninguna preocupación" por las declaraciones de los presidentes provinciales, ya que "todas son perfectamente legítimas, todas son entendibles y todas son perfectamente respetuosas".

Eso sí, ha advertido que el congreso no es la única vía "democrática" para elegir un sucesor. "Todo lo que dicen los Estatutos de un partido democrático es democrático", ha sentenciado.

Los Estatutos del PPdeG contemplan la vía de un congreso para resolver un relevo precipitado tras una renuncia, pero no solo esa fórmula si no también la posibilidad de que el sucesor sea ratificado a través del acuerdo del Comité Ejecutivo, que en este momento estaría legitimado después de ser renovado en un todavía reciente congreso celebrado el pasado verano.

Pero incluso dentro del partido hay dirigentes que reconocen que esta opción, la del Comité Ejecutiva, podría ser interpretada como "un dedazo" y no daría pie a un liderazgo fuerte, dificultando, además, las opciones para conservar la Xunta cuando toquen de nuevo las elecciones autonómicas, en 2024.

Feijóo, a quien nunca le ha gustado que le marquen los tiempos, ha defendido este miércoles que el proceso se hará "con normalidad, según marcan los Estatutos y de forma democrática".

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