El asistente de velocidad inteligente (ISA) instalado en todos los vehículos reduciría el número de fallecimientos en un 20% y las colisiones en un 30%, según un estudio de la Consejo Europeo de la Seguridad en el Transporte (ETSC).
Cámara de visión trasera en un Mercedes, foto de PXfuel
A partir del 1 de enero de 2022 se incluirán algunos cambios en los coches que se vendan en la Unión Europea. Estos deberán llevar de manera obligatoria dos sistemas tecnológicos que se han ido expandiendo ya en los últimos años.
El primero de ellos es el ISA o Asistente de Velocidad Inteligente, cuya función es hacer que los vehículos se adapten a la velocidad máxima permitida y no los deja circular a más. Por otra parte, a partir del 1 de enero todos los coches deberán tener cámara de visión trasera para aparcar, que se activa cada vez que el coche inicia la marcha atrás y permite dos cosas: aparcar mejor y evitar atropellos.
Muchos coches ya disponen de estos dos innovadores sistemas, pero a partir de 2022 será obligatorio que los tengan. Esta novedad llega en el marco del plan 'Visión Cero', lanzado desde Bruselas con la intención de llegar a 2050 con cero fallecidos en las carreteras.