El delantero gallego permanecerá en el Deportivo Alavés salvo una gran e inesperada oferta de última hora.
Joselu celebra un gol ante el Real Madrid | Foto: EP
Para Joselu, este verano, a sus 31 años, iba a ser el de su gran salto. Y no es porque no haya jugado en grandes escuadras, porque Celta de Vigo, Deportivo de La Coruña, Newcastle, Eintracht de Frankfurt o el propio Deportivo Alavés sean pequeños, sino porque este mercado, con el Sevilla al acecho, Joselu podría ingresar en una entidad con la que pelear por títulos. Tal fue el interés de los hispalenses que incluso llegaron a alcanzar un acuerdo con el ariete, que hizo presión para vestir la próxima temporada la camiseta sevillista. Sin embargo, las pretensiones del cuadro vitoriano han terminado por torpedear las negociaciones.
El Alavés, sabedor de que Joselu es en estos momentos su jugador estrella (sus once goles la pasada campaña le avalan), no quiso bajarse del burro de los 15 millones que marca su cláusula de rescisión. El Sevilla llegó a poner sobre el tapete cerca de 10 millones, pero el conjunto babazorro nunca se mostró dispuesto a negociar una salida de su delantero, que solo abandonaría Mendizorroza mediante el pago de su cláusula.
En las oficinas del Sevilla nunca escondieron su interés, pero tampoco se mostraron locos por su contratación. Es por eso, que ante la férrea postura de los vascos, en Nervión han decidido explorar otras alternativas en el mercado. Fue la “valoración económica” la que, según Monchi, motivó la renuncia de los sevillistas, a los que convencía el “perfil” del galaico-germano pero no su precio.
Con 31 años, es tal vez la última opción de Joselu de protagonizar un gran fichaje. Él, acostumbrado a moverse cada poco, estaba convencido de tener la oportunidad de fichar por la escuadra que dirige Lopetegui. Ahora, incluso podría renovar con sus “captores” y prolongar su vinculación con el Alavés. Un culebrón al que, según parece, todavía le queda un par de capítulos.