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La concesionaria del servicio de transporte urbano de Vigo, Vitrasa, ha tachado de "desproporcionada" la convocatoria de cuatro jornadas de huelga para los días 3, 6, 7 y 8 de agosto y ha confiado en que el comité de empresa "recapacite".

En un comunicado, ha achacado los paros previstos a un intento de "presionar para la renovación del próximo convenio colectivo" y ha asegurado que se trata de una medida que "no atiende a razón". Además, ha señalado que fue apoyada por 107 votos, que "representan al 33% de los conductores y al 27,2% del total del personal".

Además, Vitrasa ha destacado que trabaja "cada día" para adoptar medidas que "garanticen un servicio seguro y de calidad para los vigueses" ante "un contexto tan complejo marcado por la crisis sanitaria", que implica la limitación de aforos en los autobuses.

Así las cosas, ha confiado en que el comité de empresa "recapacite" y "entienda que los verdaderos perjudicados de esta desacertada convocatoria son los usuarios" del transporte público. De este modo, ha advertido de que "esta huelga no beneficia a nadie" y ha lamentado las "molestias" que esta situación pueda ocasionar a la ciudadanía, a la que ha garantizado la prestación de servicios mínimos.

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