Ir al sitio completo

Galiciapress entrevista a Ana María Pena Purriños, concelleira de Industria de As Pontes y, por lo tanto, encargada de bregar con Endesa sobre el cierre de la térmica y las posibles alternativas industriales, entre las que podrían estar dos grandes proyectos financiados con los fondos de la UE para la recuperación.


Pena reconoce las discrepancias existentes entre Endesa y las administraciones públicas para mantener la actividad de la planta con el uso de biocombustibles, reclama soluciones para los trasportistas y empresas auxiliares, insiste en paralizar el proceso de recolocación y se muestra abierta a explorar nuevas vías, como el uso del hidrógenos verde o la apertura en As Pontes de la planta de viscosa que programa la Xunta. 



Ana Pena, concelleira de Industria | Foto: Lorena Tenreiro  Concello das Pontes de Garía Rodíguez


El futuro de la central térmica de As Pontes es, a poco menos de dos semanas para que termine 2020, del todo incierto. Los más de 2.000 empleados -tanto directos como indirectos- asisten con estupor y con la mínima información al tira y afloja entre Endesa, más proclive al cierre, y las administraciones, que batallan por mantener la actividad con un proyecto, todavía en pruebas, basado en el uso de biocombustibles para generar energía.


Pese al gran secretismo que rodea a todo el proceso de las pruebas y sus resultados, desde Endesa ya han dejado entrever que no ven posible la viabilidad dentro de la planta y alegan “problemas económicos y técnicos” para rechazar  la quema de biocombustibles. La concelleira de Industria de As Pontes de García Rodríguez, Ana Pena, admite las “discrepancias” existentes, algo que se remonta al inicio del proceso.


Estas discrepancias se dan entre los componentes de la Mesa de Análisis de Resultados, compuesta por tres técnicos de las administraciones (de Gobierno de España, Xunta y Concello de As Pontes) y los técnicos de la compañía, ya que donde unos ven posibilidades ,  otros rechazan la continuidad.


“Una vez finalizadas las pruebas, y si bien el informe definitivo todavía no ha sido valorado, existe una discrepancia entre las partes. Endesa alegó que no ve viabilidad a la planta por supuestos problemas con algunos elementos, como puede ser el cloro. Pero la otra parte técnica está completamente de acuerdo en que cualquier tipo de problema que pudo surgir durante las pruebas se puede solventar con facilidad”, argumenta Pena. 


¿QUÉ PASA AHORA?

Sin acuerdo entre las partes que componen la mesa técnica, lo más inmediato es la reunión de la Mesa de Seguimiento en la que participarán los actores políticos en donde se abordará los resultados del informe definitivo de las pruebas. Sobre si se trata de una distancia insalvable o si las partes discordantes todavía pueden tender puentes, Pena mostró su “confianza” de que las diferencias puedan ser limadas.

“Desde el primer momento no ha mostrado una voluntad real por alcanzar la viabilidad con estas pruebas de biocombustible”


Con todo, desde la Concellería de Industria reprochan la actitud de Endesa. “Desde el primer momento no ha mostrado una voluntad real por alcanzar la viabilidad con estas pruebas de biocombustible”, lamenta, e insiste en que los problemas a los que alude la energética son “salvables” pero solo “desde la voluntad”.  


HIDRÓGENO VERDE Y OTRAS ALTERNATIVAS

La planta, a día de hoy, solo tiene esas dos salidas: o biocombustibles o cierre. “La única alternativa que proponía Endesa para la generación de electricidad era el cierre, aunque durante el proceso surge la alternativa de los biocombustibles. Endesa incluye en esa solicitud de cierre que presenta al Ministerio el condicionante de que el cierre está vinculado a estas pruebas. La alternativa que podemos contemplar es esa, la de los biocombustibles”, informa Pena, antes de añadir que nadie les ha notificado nuevas alternativas al respecto.


Sin embargo, los pasos dados por Endesa en plantas similares a As Pontes desconciertan a muchos. Las plantas de Teruel y León operan ahora con hidrógeno verde, una apuesta clara de futuro por parte de Endesa y un sector que figura en la hoja de ruta la Xunta en sus proyectos tractores de la economía gallega. Una planta de hidrógeno verde en As Pontes sería, a priori, una buena alternativa. Hay que tener en cuenta que los planes de la Xunta para los proyectos financiados con los fondos euros anti-covid incluyen, precisamente, una planta de hidrógeno.


“Nosotros estamos abiertos al hidrógeno, ya que todo apunta a que es el futuro en el sector energético, así como a cualquier otra opción que se contemple para el territorio”, manifiestan desde el gobierno local. Pena puntualiza que a la hora de hablar de alternativas para la planta estas van siempre dirigidas “al funcionamiento de la central térmica”, pero que el concello explora todo tipo de oportunidades industriales.


Prototipo de una planta de hidrógeno verde


“Estamos estudiando distintas posibilidades. Hasta ahora no hay nada cerrado. Lo contemplamos ahora y lo contemplábamos anteriormente: nunca pensamos en que As Pontes tuviese que estancarse en la actividad de una central térmica. Somos una villa industrial y  queremos que aquí se asiente industria porque entendemos que el futuro de los vecinos pasa por ese asentamiento”, indica Pena.


“REUNIONES ATRASADAS”

Desde el BNG criticaban recientemente el abandono que sufren los trabajadores de la térmica desde julio, una vez celebradas las elecciones, tanto por parte de la Xunta como del Gobierno central. Unos trabajadores que siguen adelante con sus protestas a la vista de los pocos o nulos avances por conservar su empleo. “Hasta el momento durante todo el proceso se ha estado apoyando esta iniciativa desde la Xunta y el Ministerio, así como a través de los grupos parlamentarios, pero sí es cierto que, en gran medida por culpa de la pandemia, tenemos varias reuniones retrasadas tanto con el Gobierno de Galicia como con el Ministerio”, reconoce Pena.


“Lo que nos trasladan ambas administraciones es que el apoyo sigue vivo y apostando por esta alternativa para As Pontes, pero tenemos pendiente la celebración de la mesa de transición, que estaba a expensas del fin de las pruebas, y tenemos solicitadas varias reuniones con la Xunta y seguimos pendientes de que se puedan celebrar”, subrayan desde el consistorio pontés.


SITUACIÓN “DRAMÁTICA” DE LOS TRANSPORTISTAS Y RECOLOCACIÓN

Pendientes de esas reuniones siguen los empleados de la planta y los vinculados a ella de forma directa, como los transportistas, que el pasado mes de octubre trataron de paralizar con sus protestas el supuesto proceso de desmantelamiento. Dos meses después el empleo de los transportistas sigue en entredicho, así como el de las auxiliares, algo que tienen en consideración desde el gobierno municipal.


“Los transportistas fueron los primeros y principales afectados, en el sentido de que hace ya un año y medio desde el fin del uso del carbón en la central, quedándose así sin trabajo y sin ingresos”, señala Pena de un sector “para el que reclamamos soluciones desde el primer momento y que siguen sin llegar” y que ahora vive “una situación dramática”.


Protestas de los transportistas en As Pontes


En lo referido a las auxiliares, por su parte, Pena recuerda el “compromiso” de Endesa de mantener el empleo, aunque ese compromiso finaliza este mismo mes. “Estamos a expensas de ver qué posibilidades hay para ayudarlos y de que Endesa busque alternativas como solicitamos desde el principio”, reclama.


Mientras, en la planta ahora uno de los temas que más preocupan a los trabajadores es el proceso de recolocación iniciado por Endesa. Esta misma semana medios leoneses se hacían eco de la llegada de empleados de As Pontes a la planta de Ponferrada. A la vista de estas recolocaciones, los sindicatos celebraron diversas protestas en los últimos días para pedir el cese de estos traslados, un proceso para el que desde el Concello de As Pontes solicitaron formalmente a Endesa su paralización.


¿Fue atendida esa demanda por parte de Endesa? “No”, responde con rotundidad la concelleira. “Fuimos los primeros que enviamos una carta a Endesa en cuanto los representantes de los trabajadores nos informaron del tema. Endesa no ha contestado a ese requerimiento y automáticamente nos dirigimos a la Xunta y al Ministerio para que tomasen cartas en el asunto”, puntualiza Pena.

 

“La situación de la plantilla es difícil porque hay muchas familias con su vida hecha aquí que no pueden asumir un desplazamiento a cientos de kilómetros y volver a empezar de cero”, critica. A renglón seguido, considera que esto supone a su vez un golpe durísimo a la economía de la zona, ya que el éxodo de los trabajadores, muchos de ellos con niños en edad escolar, contribuye de forma clara al empobrecimiento de la zona tanto económico como demográfico.


¿PLANTA DE VISCOSA?

En otro orden, la Xunta, usando los citados fondos de reconstrucción anti-coronavirus que llegarán de Bruselas, pretende construir una fábrica de viscosa en Galicia de la mano de una empresa privada, posiblemente ligada al grupo Inditex. En principio, As Pontes, por su situación geográfica y sus características, podría reunir los requisitos para albergar estas instalaciones.


Desde la administración local no esconden su candidatura y creen que el municipio es un lugar idóneo para esta iniciativa, que tendría una repercusión inmediata en toda la comarca del Eume. 


“No sabemos si es la ubicación que tiene en mente la Xunta, pero desde luego nosotros estamos abiertos a que esa planta se ubique aquí”, enfatiza Pena. A esto, añade los recursos naturales con los que cuenta la localidad y que son necesarios para el desarrollo de esta actividad, como agua abundante y madera, dos elementos básicos para esta operación.


“Entendemos que somos una de las ubicaciones ideales y estamos receptivos para que cualquier tipo de proyecto industrial que se pueda ubicar en As Pontes. Estamos esperando a que se decidan las zonas elegidas y nosotros sin duda ofrecemos As Pontes para que sea la seleccionada”, concluye Pena.

POWERED BY BIGPRESS