Diego Mariño aparece de nuevo como una alternativa para la portería del Celta, maltratada por las lesiones en los últimos años.


Mariño suena con fuerza para reforzar al Celta | Foto: Real Sporting de Gijón


Con la permanencia en la palma de la mano después de cosechar un importante punto ayer ante el Atlético de Madrid, el Celta de Vigo puede empezar a permitirse pensar en sus planes a largo plazo. A expensas de que un tropiezo del Mallorca o una victoria los acerque definitivamente a la salvación matemática, en A Sede no quieren perder más tiempo y comienzan a planear la próxima temporada, donde la portería parece ser uno de los objetos de debate, como viene siendo habitual en cada ventana de fichajes.


LESIONES EN LA PORTERÍA

Este año, especialmente en lo que a la primera mitad de la temporada se refiere, el Celta de Vigo naufragó por la retaguardia. Desde la llegada de Óscar García el equipo mejoró en el aspecto defensivo y hoy, con 44 goles en contra, ha mejorado sensiblemente su media de goles encajados. Con todo, este sigue siendo uno de los aspectos a mejorar, y en Vigo valoran la posibilidad de dar un salto de calidad a la portería con la incorporación del gallego Diego Mariño.


El guardameta es uno de los mejores arqueros de Segunda División y a muchos les sorprende que todavía siga en la división de plata del fútbol español, pese a demostrar durante años que es un cancerbero de primerísimo nivel. En el Sporting de Gijón parece haber encontrado su zona de confort, pero el Celta podría proponerle regresar a casa para garantizar una mayor competencia por los guantes del arco celtiña.


El vigués jugaría por fin en el Celta, un equipo al que siempre se le ha vinculado. Si bien en un principio no llegaría para ser titular, sí llegaría para intentar poner remedio a un mal que viene acosando a los porteros celestes desde hace varios cursos: las lesiones. Sergio Álvarez, ‘O Gato de Catoira’, ha sido el más maltratado por las lesiones este año, con una rotura de menisco que podría apartarlo del verde incluso el año que viene.


Rubén Blanco y Villar también han sufrido lesiones importantes este año y entre los tres suman 24 jornadas en el dique seco por las lesiones. No obstante, con tres porteros ya en plantilla, el Celta tendría que deshacerse de uno, y mientras que Sergio parece querer acabar sus días como jugador en Vigo, y que la lesión impedirá previsiblemente cualquier movimiento, Villar se postula para ser el que abandone Balaídos, ya sea en forma de cesión o por medio de una venta. 

POWERED BY BIGPRESS