Espacio para los perros guías, fácil acceso en silla de ruedas e interacción más facil entre ciudadanos y vendedores. Estas algunas de las nuevas características del nuevo tipo de quiosco de la ONCE, instalado ya en Santiago.
La Once ha instalado en Santiago de Compostela el primero de sus nuevos quioscos, un modelo "más accesible" para todos los agentes vendedores con discapacidad, "más ecológico" por la tipología de productos de construcción y consumos y, especialmente, "con más facilidad de comunicación con el público".
Este primer quiosco ha sido instalado en la Plaza de Vigo y lo atiende la vendedora afiliada de la Once Cipriana Queiruiga Gómez. Con estas nuevas instalaciones, la Once cambia la imagen de esta puerta de acceso a un mundo de inclusión, cumpliendo, además, con los requisitos que actualmente demanda el mercado y con aquellos relacionados con la accesibilidad universal.
El nuevo diseño de quiosco cuenta con unas dimensiones que no sólo no obstaculizan el paso en las aceras, sino que permiten una mayor accesibilidad para la persona que ejerce la venta y también para quienes se acercan a compartir unos minutos con el agente vendedor.
ESPACIO PARA LOS PERROS GUÍAS Y LAS SILLAS DE RUEDAS
Para las personas ciegas usuarias de perro guía, el nuevo quiosco cuenta con un espacio que el perro esté tumbado en el suelo cómodamente mientras su amo trabaja. Para quienes utilizan silla de ruedas, el modelo dispone de una rampa fija de acceso al interior del quiosco, además de que todas las zonas de exposición son accesibles para estas personas mediante una plataforma que se adecua a sus necesidades.
Además, para mejorar el confort del vendedor, se incluye una silla ergonómica, con regulación de altura y del respaldo; ruedas, apoyabrazos y reposacabezas; y un reposapiés regulable en altura. Por otra parte, el mobiliario cuenta con cajones e incluso un pequeño armario para poder colgar las prendas de abrigo.
MÁS CERCANO AL PÚBLICO
Con el objetivo de "acercarse más al público", el nuevo modelo de quiosco de la Once muestra un "excelente escaparatismo", con una "gran superficie acristalada". Está dotado con dos puntos de atención de venta, uno en el frontal, y el otro, que ocupa el ancho de la puerta, cumple con la normativa sobre accesibilidad en cuanto a altura se refiere, para atender a personas con necesidad de utilizar silla de ruedas.
La exposición de los productos de juego es más clara y organizada para ayudar al cliente en su elección de compra y, además, no impide la visión del vendedor por parte del cliente, con lo cual el acto de comunicación y compra se hace "más natural".
El quiosco presenta en sus laterales exteriores frases en braille, para crear entre los transeúntes una clara identificación del quiosco con la Once.