El Partido Popular cae en estimación de votos sin dar síntomas de recuperarse y Pablo Casado no logra convencer a su electorado, que tiende a la indecisión o la abstención en las próximas elecciones generales del 28 de abril.
Así lo indica la séptima entrega del 'tracking' de IMOP Insights para 'El Conficencial', que señala que el partido de Casado tiene un 18,6 por ciento de apoyo, un descenso de 0,8 puntos respecto a la encuesta anterior y de 14,5 puntos en comparación con las elecciones de 2016.
Según estos datos, el PP pasaría a tener 68 escaños, dos menos que en la oleada anterior y la mitad que hace tres años. En dos semanas, habría perdido hasta 700.000 electores potenciales.
Esto contrasta con la relativa sostenibilidad de sus adversarios. La distancia respecto al PSOE ha pasado de 8,4 puntos a 12,4 puntos, y sobre Ciudadanos se ha reducido de 7,6 a 2,8 puntos.
Los socialistas se mantienen en los 135 escaños, que sumados a los 34 de Pablo Iglesias, los tres de Compromís y los seis de los nacionalistas vascos superarían la mayoría absoluta.
El voto de la izquierda supera al de la derecha, con un 44,4 por ciento para PSOE y Unidas Podemos, frente al 43,3 por ciento de PP, Cs y Vox.
IMOP destaca que los votantes que pierde el PP no necesariamente se van a Cs o Vox, sino que se mueven entre la indecisión o una posible abstención.
Los datos muestran claramente que el electorado popular ha entrado en duda o, quizás, en un cierto desánimo. Este segmento se sitúa en el 18,2 por ciento, el porcentaje más elevado de todos los partidos.