El lehendakari Iñigo Urkullu ha confirmado este jueves ante el tribunal que juzga el proceso independentista en Catalunya su labor de mediación desde el verano anterior al referéndum independentista del 1 de octubre de 2017 y, en concreto, ha informado de que el 19 de julio de ese año mantuvo un encuentro en Moncloa con el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, con el que después también sostuvo numerosas conversaciones telefónicas.
Según ha explicado Urkullu, esta labor comenzó después de que el expresidente catalán Carles Puigdemont le trasladara el 19 de junio de 2017 la situación de "bloqueo absoluto" en las relaciones entre la Generalitat y el Gobierno central, por lo que le pidió que "encauzara" el diálogo.
La novena jornada del juicio por el procés independentista en el Tribunal Supremo se ha reanudado con el interrogatorio en calidad de testigo del lehendakari, cuya relación con este procedimiento es su intervención para evitar la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) -que finalmente tuvo lugar 27 de octubre de 2017- y cuyos pormenores ha comenzado a relatar.
El nombre de Urkullu salió a relucir este martes durante el testimonio del expresidente Mariano Rajoy, quien a preguntas del abogado de los exconsellers Josep Rull, Jordi Turull y del que fuera presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Pina, reconoció haber mantenido contacto con el presidente vasco, al igual que "con otra mucha gente" durante los días previos a la citada declaración. Rajoy evitó hablar de él como mediador y no supo especificar si los contactos fueron presenciales o por vía telefónica.
Urkullu ha confirmado este jueves ante el tribunal su labor de "enlace" entre Generalitat y Gobierno central desde el verano anterior al referéndum independentista del 1 de octubre de 2017, pero ha querido dejar claro que el exjefe del Ejecutivo Mariano Rajoy siempre fue "renuente" a dar cualquier paso "que pudiera interpretarse como una negociación que traspasara los límites de la Constitución".
Fue en un encuentro de cuatro horas, ha relatado, en el que le solicitó que tratara de "encauzar la relación para encontrar una solución pactada" entre las dos administraciones.
Así lo ha contado el lehendakari, de forma directa y concisa, a preguntas de Francesc Homs, abogado del exconseller catalán Josep Rull.
Después de reunirse con Puigdemont, ha indicado Urkullu, mantuvo un encuentro en la sala de autoridades del aeropuerto de El Prat (Barcelona) con la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a la que informó de su conversación con el expresidente catalán, por lo que le pidió que se lo trasladara a Rajoy. La reunión se materializó el 19 de julio en el Palacio de la Moncloa y versó "exclusivamente" sobre el problema con Catalunya.
El político vasco, que ha precisado que el Gobierno central no pidió su mediación, ha explicado que la actitud de Mariano Rajoy fue la de "escucha y atención", pero "renuente a cualquier paso que se interpretara como una negociación que traspasara los límites de la Constitución".