La sentencia del Tribunal Supremo que tumba parte de la ordenanza municipal de normalización lingüística de Lugo, suscita una movilización a pie de calle. La convoca Queremos Galego, la plataforma compuesta por más de 700 entidades.
Unha pasada protesta a prol do galego
La concentración será el miércoles 6 de marzo, a las 12 h frente al Ayuntamiento de Lugo. Los organizadores consideran el dictamen, que ratifica otra anterior del Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG), "un insulto contra la dignidad del conjunto del pueblo gallego".
DESIGUALDAD LEGAL ENTRE LENGUAS
Queremos Galego argumenta que los jueces discriminan en la práctica por razón de lengua; al primar el "supuesto derecho de desconocimiento del gallego por parte de las empresas prestadoras de servicios a la administración municipal frente al derecho a emplearlo y ser atendido en igualdad de condiciones por parte de las y de los ciudadanos". Hace falta recordar a la desigualdad de raíz existente en la legislación vigente; conocer español es un deber, mientras que las lenguas autonómicas son solo un derecho nos sus correspondientes territorios.
"¿Qué libertad hay de emplear el gallego si las empresas concesionarias de la administración no tienen que ofertarlo? La única libertad que viene de reconocer el TS es la de estas empresas para excluir a los hablantes de gallego de servicios públicos", añaden los activistas a favor de la lengua propia del país.