El Ejecutivo central, en una respuesta parlamentaria, insiste "no tiene legitimidad" para intervenir en la entidad "más allá de preocuparse"

El Gobierno central garantiza que tanto él como la Xunta disponen de "instrumentos" para dar asistencia sanitaria a los 900 españoles del Centro Gallego de Buenos Aires (CGBA) "si esta dejara de prestarse".

No obstante, el Ejecutivo vuelve a alegar que "no tiene legitimidad de ninguna clase para intervenir" en los asuntos de esta institución "más allá de manifestar su preocupación" por su situación económica --se encuentra en concurso de acreedores desde hace más de un año-- y "de ofrecerse a colaborar en la búsqueda de soluciones".

Así se desprende de una respuesta del Gobierno central, a la que ha tenido acceso Europa Press, a una pregunta escrita registrada en el Congreso por el diputado de En Marea Miguel Anxo Fernán-Vello. En la réplica, el Ejecutivo insiste en que ni él ni su embajada en Buenos Aires "tienen legitimidad alguna" para influir en los asuntos del Centro Gallego de Buenos Aires.

"El Gobierno comparte la necesidad de proteger y velar por los intereses de los españoles allí donde estos puedan encontrarse, (...) evitando o paliando, en la medida de lo posible, aquellas situaciones que puedan ser perjudiciales para los mismos", reivindica.

Por ello, la Administración subraya que los emigrantes de origen gallego en Argentina, de los que "la mayoría" ostentan la doble nacionalidad, cuentan con asistencia sanitaria a través de diferentes métodos --el sistema público argentino, seguros privados o instituciones como el CGBA--.

En este contexto, el Ejecutivo indica que el Centro Gallego tiene unos 4.000 socios, de los cuales "no más de 900" son españoles que actualmente "cuentan con asistencia sanitaria". "Si esta dejara de prestarse, cosa que de momento no ha ocurrido (aunque sí se ha deteriorado), tanto el Gobierno como la Xunta de Galicia disponen de instrumentos para asegurar su asistencia por otras vías", garantiza, remitiéndose a unos 300 socios del CGBA que "por propia decisión" abandonaron la institución.

EL PATRIMONIO HISTÓRICO "NO CORRE NINGÚN PELIGRO"
En cuanto al patrimonio pictórico y bibliográfico del Centro, el Gobierno dice "no tener ninguna señal" de que "corra ningún peligro", si bien asegura que la Xunta está en contacto con el Ministerio de Cultura del país latinoamericano "para explorar posibles escenarios de futuro que permitan mantener ese patrimonio en su integridad". No obstante, advierte que "tendrá que ser necesariamente en Argentina, porque la legislación local impide la salida del país de bienes de esa clase", lo que tampoco los socios de la institución "parecen desear".

Así las cosas, el Ejecutivo continúa alegando, en la respuesta parlamentaria, que son los socios los que tienen "toda la legitimidad para intervenir en lo que concierne al CGBA" y "decidir sobre el futuro" de la entidad.

Asimismo, recuerda que, precisamente, los socios del Centro Gallego presentaron varias denuncias penales por malversación contra el actual interventor, quien les replicó con otra demanda por calumnias. "Evidentemente, la embajada no tiene margen alguno de intervención en esto", zanja el Gobierno.

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