El Seprona investiga la muerte de cuatro animales y las lesiones de otros cinco en la parroquia de Viladesuso, en Oia.



En la tarde de ayer dos vecinos de la parroquia de Viladesuso, en Oia, alertaron a las autoridades de la muerte de cuatro caballos salvajes, encerrados en una manga de desparasitación.


Los cuatro equinos, atrapados en ese pasillo estrecho, fueron golpeados con instrumentos contundentes hasta morir y otros cinco tienen lesiones, aunque pudieron ser liberados por los vecinos.


El Seprona investiga este nuevo caso de crueldad animal. Los cuatro animales fallecidos tienen microchip y sus propietarios ya están al corriente de los hechos. 

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