"Cuando sepamos lo que pasa, podremos actuar", asegura el conselleiro de Cultura, frente a las críticas de PSdeG y BNG
El conselleiro de Cultura e Turismo, Román Rodríguez, ha asegurado que el Gobierno autonómico está "expectante" ante como puedan discurrir los próximos acontecimientos en el Centro Gallego de Buenos Aires, pero ha rechazado "expropiar la voluntad" de los socios, que han manifestado que "quieren seguir preservando ellos su patrimonio cultural, tal y como llevan haciendo décadas".
En concreto, en respuesta a Juan Manuel Díaz Villoslada (PSdeG) y Ana Pontón (BNG), quien recientemente visitó Argentina, el conselleiro ha remarcado que su "compromiso" en relación a velar por el patrimonio cultural ligado al Centro y por el bienestar de la diáspora es "el mismo que hace unos meses", pero ha insistido en la necesidad de conocer "qué escenario" hay.
"Hubo elecciones en el Centro y hay una nueva directiva que no ha tomado posesión. Se da una situación de vacío de poder, cuando sepamos lo que pasa, podremos actuar", ha sentenciado Rodríguez, quien ha asegurado "compartir" con la oposición su "preocupación" por el patrimonio cultural y por el futuro del hospital.
En todo caso, ha advertido de que socialistas y nacionalistas "se equivocan de enemigo político", puesto que la Xunta no es "la responsable de la situación", sino la gestión "más o menos negligente de los interventores".
Dicho esto, ha insistido en que el Ejecutivo gallego quiere "preservar" el patrimonio cultural y "garantizar la atención sanitaria", pero también ha recalcado que es preciso esperar a ver qué pasos se dan.
"¿Compramos? ¿A quién? ¿A colectivos gallegos? ¿A los acreedores? ¿O lo expropiamos, si no lo quieren vender", se ha preguntado, antes de concluir que Galicia hará pública una postura "cuando haya la mínima de certeza" sobre lo que va a pasar. "Galicia estará ahí; mientras, habrá que esperar a que decidan. Estaremos vigilantes, colaborando y con respeto", ha zanjado.
"CON VOLUNTAD POLÍTICA, SE PUEDE SALVAR"
Previamente, tanto Díaz Villoslada como Pontón habían alertado de la situación del Centro Gallego de Buenos Aires y de la necesidad de "preservar" su patrimonio artístico, documental y bibliográfico, así como los servicios sanitarios que presta a los asociados.
"Arrastra problemas desde 2002, pero ahora está en situación crítica y también es responsabilidad de la Xunta. Con voluntad política, el Centro y el hospital se pueden salvar", ha proclamado Pontón.